Se propagan las consecuencias de la fuga de los documentos del Pentágono en las redes sociales, en una de las infracciones de inteligencia estadounidense más graves en décadas,
A puerta cerrada, se han desencadenado conversaciones incómodas con los aliados más cercanos de Estados Unidos.
Según los informes, los documentos revelan cuán de cerca está espiando Estados Unidos. Si bien el espionaje amistoso no sorprende en los círculos de inteligencia, tener que reconocerlo siempre es un asunto delicado.
Para Estados Unidos, el momento no podía ser peor: el presidente Joe Biden se reunirá con los líderes del Reino Unido y Corea del Sur en los próximos días. Pero lo que es más importante, la guerra en Ucrania se encuentra en un punto de inflexión, y la filtración de lo que se supone es inteligencia militar reciente y específica, podría tener ramificaciones mortales sobre el terreno.
Se dice que algunos de los documentos filtrados sugieren que el ejército de Ucrania tiene una gran necesidad de municiones y que su fuerza aérea está en peligro. Según los informes, también subraya que los aliados de Ucrania creen que la guerra estará estancada durante todo el año. También se dice que los documentos sugieren que otros países están ayudando a Rusia a eludir la sanciones occidentales.
The Associated Press informó que algunos de los archivos mostraban que agentes rusos habían persuadido a los Emiratos Árabes Unidos para que trabajaran contra Estados Unidos y el Reino Unido, algo que preocupaba a EU desde octubre. Aún así, a pesar de todo el furor por las consecuencias de la filtración, hay quienes dicen que los documentos y su contenido podrían ser parte de un juego mucho más complicado.