El proyecto Ara de Google consiste en una estructura básica del móvil, donde cada usuario puede sustituir piezas dañadas, o bien dotarlo de nuevas y mayores capacidades, por ejemplo en el procesador, en la pantalla, en la batería, etc.
En su sentido más amplio, el proyecto propone un hardware abierto para crear smartphones modulares que se adapten a las necesidades personales y asimilen la innovación y la actualización del dispositivo, logrando así un producto con un ciclo de vida más largo, que enfrente la obsolescencia en esta industria de cambios y desarrollos vertiginosos.
En este escenario, el smartphone se puede convertir en un centro de operaciones al que se conectan distintos dispositivos para expandir sus funcionalidades con soluciones periféricas que atiendan las necesidades de la demanda, mismas que dejarán de ser periféricas y se incorporen al producto cuando así lo demande el mercado.
Recientemente la empresa Phonebloks diseñó un móvil modular que ha sido subido en Internet, mismo que se mostró en enero del presente año en San Francisco y Singapur.
Por ahora se desconoce la fecha en que se materializará el Proyecto Ara y que deje de ser un prototipo, sin embargo la prueba piloto está programada para este año.
Esta puede ser una gran oportunidad y la puerta de entrada miles de desarrolladores de hardware en el mundo de la movilidad.