Se estima que el 80% de la innovación futura de vehículos provendrá del software, así que los fabricantes de autos tendrán que dominar el software.
Herbert Diess, exdirector ejecutivo de Volkswagen, considera qué si bien los fabricantes de automóviles tradicionales han estado reestructurando rápidamente las fábricas para producir vehículos eléctricos y han invertido fuertemente en la fabricación de baterías, sus esfuerzos en software parecen ser más impredecibles.
Se espera que la gran cantidad de nuevas funciones digitales en los autos generen nuevos flujos de ingresos y aumenten los márgenes de beneficio. Los fabricantes tendrán dificultades para competir para cosechar esas recompensas potenciales sin un desarrollo de software más rápido y experiencias de usuario más fluidas.
El software moderno es una competencia completamente nueva que debe construirse desde cero, a diferencia del desarrollo continuo de las habilidades existentes.
‘Lo que estamos viendo ahora es una desviación de cómo se hicieron las cosas antes, cuando Volkswagen compraba sistemas de proveedores, como frenos o dirección, que ya contienen el software. Entonces, anteriormente la experiencia en software estaba principalmente con el proveedor y no con el fabricante de automóviles’, aseguró Diess.
El enfoque ha cambiado desde que todos los fabricantes líderes se han dado cuenta de que la mayor parte de la innovación futura de vehículos proviene del software; las estimaciones rondan el 80%.
Esto se debe en parte a que las características de ingeniería tradicionales como los sistemas de frenado, la dirección y el chasis, están completamente desarrollados. Y dado que los fabricantes de vehículos quieren ser dueños de la innovación, ahora tendrán que dominar el software.
En Europa, y particularmente en Alemania, los fabricantes de autos son más conscientes de que tienen que desarrollar experiencia en software y que necesitan un sistema operativo de base limpio y sólido para sus vehículos sobre el cual puedan establecer sistemas de software.
Las luchas con el VW ID.3 demostraron claramente la necesidad de tal plataforma. Es un tema enorme en Alemania, más que en cualquier otro lugar.
En Estados Unidos, el punto de venta único de Tesla es el automóvil construido alrededor de una plataforma de software, mientras que los fabricantes de automóviles tradicionales son menos avanzados.
En el software del vehículo, veremos un desarrollo similar al que vimos en los teléfonos móviles. Habrá un jugador dominante, equivalente a Apple, que es el primero en comercializar un sistema operativo que ofrece una experiencia de usuario superior.
Ahí es donde actualmente tenemos a Tesla. Fueron los primeros en comercializar un vehículo con una computadora central donde toda la innovación se actualiza permanentemente a través de un nuevo software. Ahí es donde los demás, recién ahora, están comenzando a ponerse al día.
La gran ventaja de Volkswagen es que su sistema está completamente certificado para cumplir con los altos estándares de seguridad requeridos por la industria automotriz. Luego, los fabricantes de automóviles pueden personalizar los componentes básicos según sea requerido.
‘Estamos hablando con todos en la industria automotriz y hemos iniciado discusiones sobre la integración de nuestros sistemas en futuros modelos de producción en serie’, puntualizó Herbert Diess.
