Las Tecnologías de Información juegan hoy en día un factor determinante en la competitividad de las empresas. Seleccionar y mantener una cartera tecnológica competitiva es uno de los grandes retos en las empresas. Adoptar un producto, como una plataforma para desarrollar diferenciales de negocio positivos, es una alternativa altamente competitiva que permite reducir sustancialmente los costos asociados a los servicios de TI.
El computo en la nube permite aumentar el número de servicios basados en la red, genera beneficios tanto para los proveedores, que ofrecen de forma rápida y eficiente un mayor número de servicios, como para los usuarios, que tienen la posibilidad de acceder a ellos. Asimismo, consigue aportar estas ventajas, apoyándose sobre una infraestructura tecnológica dinámica que se caracteriza, entre otras cosas, por un alto grado de automatización, una rápida movilización de los recursos, una elevada capacidad de adaptación para atender una demanda variable, así como virtualización avanzada y un precio flexible en función del consumo realizado evitando el uso fraudulento del software y la piratería.
Existen tres tipos de servicios basados en la nube: Infraestructura como Servicio (infrastructure-as-a-service, IaaS), Plataforma como Servicio (platform-as-a-service, PaaS) y Software como Servicio (software-as-a-service, SaaS). Estos tipos de plataformas ofrecen diferentes servicios y soluciones que dependerán de las necesidades del usuario final.
La Plataforma como Servicio (PaaS) consiste en ofrecer servicios en donde además del software e infraestructura se incluyen herramientas de desarrollo y servicios complementarios. Con este tipo de plataforma los desarrolladores pueden construir soluciones escalables listas para correr en la nube. Este modelo abarca el ciclo desde el desarrollo hasta la implantación, combinando la instalación de aplicaciones, compra y gestión del hardware subyacente y software y capacidades de soporte y alojamiento; proporcionando todas las facilidades necesarias para apoyar el ciclo de vida completo de construcción y la entrega de aplicaciones web y servicios totalmente disponibles a través de Internet.
“Las empresas que quieran mejorar en los servicios de la nube deben ofrecer un valor agregado, como mantenerse independientes de la plataforma, y ofrecer diferentes alternativas teniendo convenios con múltiples proveedores y no exclusividad con alguno, lo que volverá los productos y servicios realmente a la medida de los usuarios”, dijo Diego Malpica, gerente de Innovación y Tecnologías Abiertas de PRAXIS.
Actualmente se tiene la idea que los servicios basados en la Nube solo pueden ser alcanzables para empresas transnacionales y que cuentan con un gran número de empleados, sin embargo, existen soluciones que se pueden adaptar a las PyMEs ofreciéndoles paquetes para satisfacer sus necesidades, sin que esto represente una gran inversión.