Las ventas de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) alcanzaron los 1.26 billones de dólares taiwaneses (38,852 millones de dólares) en el primer semestre del año, lo que representa un aumento interanual del 28%, impulsado por el boom de la inteligencia artificial (IA).
En un comunicado, el mayor fabricante de chips del mundo, informó que sus ingresos en junio sumaron 207,869 millones de dólares taiwaneses (6,378 millones de dólares), un incremento del 32.9% en comparación con el mismo mes del año anterior.
Entre abril y junio, las ventas de TSMC, con sede en Taiwán, fueron de 673,510 millones de dólares taiwaneses (20,666 millones de dólares), lo que representa un aumento del 13.6% en comparación con el primer trimestre y del 40% respecto al segundo trimestre de 2023.
La empresa tecnológica, que dará a conocer sus resultados financieros del segundo trimestre el próximo 18 de julio, obtuvo un beneficio neto de 225,490 millones de dólares taiwaneses (6,919 millones de dólares) en los primeros tres meses de 2024, un aumento interanual del 8.9%, impulsado por la creciente demanda de chips avanzados.
TSMC, fabricante de los chips utilizados en los productos más avanzados de Apple, Nvidia, AMD y Qualcomm, ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos meses gracias al auge de las aplicaciones y dispositivos de inteligencia artificial, que requieren semiconductores muy pequeños para su funcionamiento.
Este miércoles, las acciones de TSMC en la Bolsa de Taipéi subieron un 0.5% y cerraron en un nuevo máximo de 1,045 dólares taiwaneses (32 dólares), acumulando un aumento del 76.22% en lo que va de año.
Este incremento en el valor bursátil de la compañía se debe, en parte, a la posibilidad de que próximamente anuncie un aumento en los precios de sus chips. El mes pasado, el periódico taiwanés Commercial Times informó que TSMC planeaba subir más de un 5% los precios de sus procesos de 3 nanómetros y entre un 10% y un 20% el de sus empaques más avanzados.
Según la consultora TrendForce, TSMC finalizó el año pasado con una cuota del mercado global de fabricación de semiconductores superior al 60%, muy por delante de sus dos principales competidores, la surcoreana Samsung y la estadounidense GlobalFoundries, cuya cuota de mercado era del 11.3 % y 5.8%, respectivamente.