La mayoría de las empresas de Internet en China se preparan para presentar cifras mediocres, resignadas a una nueva era de bajo crecimiento y cautela; más de un año después de que Beijing tomara medidas estrictas contra el sector.
Muchos ejecutivos de tecnología advirtieron sobre ventas publicitarias y gastos de consumo aún más débiles por el trimestre actual, debido a la cuarentena en Shanghai, que acaba de concluir esta semana, después de dos meses caóticos.
Los funcionarios de Beijing ahora están luchando para cumplir con su propio objetivo de PIB para el año. Y por primera vez en más de cuatro décadas, el crecimiento de la economía estadounidense podría superar al de China, según una estimación de Bloomberg Economics.
Esta temporada de ganancias tuvo algunos puntos brillantes para las empresas tecnológicas chinas, por supuesto. Pero en su mayoría giraron en torno a medidas de reducción de costos.
iQiyi, el servicio chino de streaming al estilo de Netflix, registró su primera ganancia trimestral después de romper las costosas guerras de contenido y subsidios con rivales como Tencent y Alibaba. Y la empresa emergente de comercio electrónico Pinduoduo, una vez conocida por sus agresivas promociones en la ciudades chinas de menor nivel, redujo los gastos de marketing en un 14%, lo que impulsó el resultado final.
Mientras tanto, en un desarrollo que podría obstaculizar el crecimiento futuro de la región, la recaudación de fondos para nuevas empresas en China se ha desplomado, reflejando el desempeño de las acciones de gigantes como Alibaba y Tencent.
El valor de los acuerdos de riesgo en el país cayó un 44% a 24,700 millones de dólares en los primeros cuatro meses de 2022, según el rastreador de datos de la industria Preqin. Esto es casi el doble de la tasa de disminución en Estados Unidos y cuatro veces el ritmo de la caída global.
La derrota que ahora barre todo el mercado tecnológico mundial, puede resultar particularmente mala en China, agravada por la represión de Internet del Partido Comunista y las medidas draconianas del control de COVID.
Tencent, por ejemplo, quizá la mayor decepción de esta temporada, esperaba un trimestre difícil para el conglomerado; pocos desesperaban un crecimiento virtualmente nulo. La empresa más valiosa de China, apenas aumentó sus ingresos del mes de marzo, y casi todas las demás métricas cayeron por debajo del consenso de los analistas. Al mismo tiempo, el competidor de Tencent, Alibaba, registró un nuevo mínimo histórico de crecimiento trimestral.
