Twitter anunció una modificación a sus políticas de uso que restará visibilidad a mensajes ofensivos o insutantes publicados por figuras de relevancia pública.
A partir de hoy, cuando algún personaje público comparta textos que se opongan a las normas de uso, su visibilidad se verá reducida.
Este cambio afectará particularmente al presidente de Estados Unidos Donald Trump, quien se caracteriza por utilizar prolíficamente la red social para externar sus ideas y posturas.
Twitter no mencionó en ningún momento a Trump ni hizo referencia a personas específicas, pero estableció tres criterios para determinar a qué usuarios se aplicarán estas medidas: ser representantes oficiales de Gobiernos, candidatos o nominados públicos, tener más de 100,000 seguidores y tener una cuenta verificada.
Hasta la fecha, si alguien como Trump u otro jefe de Estado o servidor público relevante tuiteaba algo que no respetaba las reglas internas de Twitter (por ejemplo por su carácter ofensivo o insultante), la compañía hacía una excepción y no lo retiraba al considerar que el emisor era una figura de interés público.
Por ello, la red social no ha eliminado mensajes del presidente estadounidense –que se caracteriza por emitir mensajes con un estilo agresivo– susceptibles de violar sus normas internas, mientras que probablemente sí lo haría con un ciudadano anónimo.
El cambio en las prácticas internas de Twitter no implicará que de ahora en adelante mensajes de ese tipo emitidos por Trump o por otros políticos destacados sean retirados, pero sí que se alertará a los usuarios de que el contenido no respeta la normativa interna y se reducirá su visibilidad para que lleguen a menos gente.
La alerta presentará una leyenda del tipo: ‘Las reglas de Twitter relativas a comportamiento abusivo se aplican a este tuit. Sin embargo, Twitter ha determinado que puede ser de interés público que este tuit siga disponible’ y el usuario deberá dar clic en ella para poder leer el mensaje original.
La compañía también explicó que cuando se produzcan casos así tomarán ‘las medidas necesarias para asegurar que ese tuit no sea elevado algorítmicamente’ en el servicio, es decir, que no gane visibilidad.
El objetivo de este movimiento es ‘conseguir el equilibrio correcto entre permitir la libertad de expresión, promover la responsabilidad individual y reducir los daños potenciales derivados por esos tuits’, dijo la empresa.