El deseo de los viajeros de conectarse en línea hace que un alto porcentaje se conecte a redes WiFi inseguras y pongan sus datos personales en peligro, según un estudio de Kaspersky Lab.
La investigación, que encuestó a 11,850 personas de toda Europa, Rusia, América Latina, Asia Pacífico y Estados Unidos, encontró que la ciberdelincuencia es común en el extranjero.
Sin embargo, como cada vez más información esencial se almacena en línea, desde mapas y confirmaciones de hotel, hasta detalles de su registro y pases de abordar.
Los viajeros internacionales a menudo no tienen más remedio que conectarse a su llegada. Muchos estarán dispuestos a utilizar WiFi en lugar de incurrir en tarifas de roaming, a pesar de que al hacerlo se expongan a riesgos.
Al salir del aeropuerto, cerca de la mitad (44%) ya está en línea, y la mayor parte (69%) se conecta con el fin de permitir que la familia y seres queridos estén informados. Además, casi 4 de cada 10 (39%) se conectan principalmente para descargar información sobre el viaje.
La presión de trabajo (38%) es también un factor importante, como lo es el deseo de ponerse al día en las redes sociales (34%). 1 de cada 3 (34%) afirma que ponerse en línea tan pronto como sea posible es algo que simplemente hace de forma instintiva.
Estamos tan acostumbrados a conectarnos cuando estamos en casa, que cuando viajamos al extranjero prácticamente no nos detenemos a pensar dónde nos conectamos, cómo nos conectamos o quién podría estar ‘escuchando’.
8 de cada 10 personas (82%) se conectan a redes WiFi de acceso público inseguras y de uso gratuito en terminales de aeropuertos, hoteles, cafeterías o restaurantes. Además, el 50% olvida que sus dispositivos conectados están repletos de información personal y muy sensible, porque los utilizan para tantas otras cosas, como tomar fotos y valerse de mapas.
Pero lejos de casa y de las redes de confianza, la falta de atención en la seguridad de las redes juega a favor de los ciberdelincuentes. Casi 1 de cada 5 (18%) viajeros ha sido víctima de la delincuencia informática cuando está lejos de casa, en comparación con el 6% de aquellos que han enfrentado la delincuencia en la vida real.
Esto no es sorprendente si se tiene en cuenta el hecho de que nuestros hábitos digitales prácticamente no cambian mientras estamos en el extranjero, incluso cuando podemos estar más expuestos en redes públicas inseguras.
Alrededor del 50% de los que respondieron a la encuesta dicen que hacen transacciones bancarias (61%) y compran en línea (55%) a través de una conexión WiFi en el extranjero.
Nuestra vulnerabilidad también se incrementa por cosas que hacemos en línea con mayor frecuencia mientras estamos fuera de casa. Por ejemplo, 1 de cada 8 (13%) es más probable que publique en las redes sociales en el extranjero, y 1 de cada 7 (14%) dice que compra más en línea usando su tarjeta de crédito.