Vodafone reportó pérdidas netas de 155 millones de euros durante el periodo de abril a septiembre, en comparación con las ganancias de 1,202 millones registradas en el mismo lapso del año anterior, atribuyendo este resultado en parte a desfavorables tipos de cambio.
En un comunicado dirigido a la Bolsa de Londres, el conglomerado de telecomunicaciones señaló que el beneficio operativo para este semestre se ubicó en 1,655 millones de euros, reflejando una disminución del 44.2% en comparación con el mismo periodo del año previo.
El beneficio antes de impuestos para el semestre alcanzó los 550 millones de euros, mostrando una caída del 63.7% respecto a los primeros seis meses del año fiscal anterior, mientras que se registró un gasto fiscal de 705 millones de euros.
Los ingresos alcanzaron los 21,937 millones, experimentando una disminución del 4.3% en comparación con el periodo anterior, a la vez que la deuda neta se redujo en un 20.4%, situándose en 36,240 millones de euros.
La empresa atribuye la disminución de los ingresos al impacto de tipos de cambio adversos y a la venta de filiales como Vantage Towers, Vodafone Hungría y Vodafone Ghana durante el año fiscal anterior.
Destaca también la venta de Vodafone España como parte de la estrategia de simplificación del grupo y enfoque en el mercado del Reino Unido.
En mayo de 2023, Vodafone delineó una nueva hoja de ruta centrada en tres prioridades: clientes, simplicidad y crecimiento. La venta de Vodafone España, valorada en 5,000 millones de euros, forma parte de la estrategia del grupo para impulsar el crecimiento.
