El precio del Bitcoin saltó por encima de los 42,000 dólares, en medio de un fuerte repunte de los tokens digitales, impulsado por el optimismo sobre una inminente revisión de la supervisión de las criptomonedas en Estados Unidos, que la Secretaria del Tesoro, Janet Yellen, calificó como ‘histórica’.
La mayor criptomoneda subió hasta un 10% (42,427 dólares) el miércoles por la mañana en Nueva York, su nivel más alto desde el 2 de marzo.
Por su parte, Ether subió 8%, mientras que las llamadas monedas de privacidad, como Monero, registraron grandes ganancias.
El avance de las criptomonedas se produjo cuando un amplio repunte de riesgo abarcó las acciones europeas.
El presidente Joe Biden firmará una orden ejecutiva más tarde el miércoles, que ordena las agencias gubernamentales que analicen más de cerca los problemas, desde el desarrollo de un dólar estadounidense digital, hasta la lucha contra las finanzas ilícitas.
El objetivo es aprovechar los beneficios potenciales de los activos digitales y al mismo tiempo abordar los riesgos, dijo la Casa Blanca en una hoja informativa.
Las agencias tendrán de 60 a 180 días para completar sus informes, dijo un alto funcionario de la administración el martes por la noche, después de lo cual, la administración planea actuar rápidamente para llevar a cabo las recomendaciones.
Yallen dijo que los esfuerzos del departamento en virtud de la orden ejecutiva complementarían el trabajo que ya se ha realizado, incluso el informe que el grupo de trabajo del presidente sobre mercados financieros publicó el año pasado sobre las monedas estables.
Las monedas de privacidad, llamadas así por el mayor grado de anonimato que brindan a los usuarios, fueron algunas de las mayores ganadoras en las últimas 24 horas, con Monero saltando un 21% y Zcash un 17%, según los datos de CoinGecko. Las ganancias fueron impulsadas por la especulación de que pueden desplazar el tráfico de pago por la sanciones a Rusia.
Si bien las monedas de privacidad permiten un mayor grado de anonimato, las redes en las que viven son menos descentralizadas y menos seguras que Bitcoin, y tienen una capitalización de mercado limitada.
En lugar de una nueva tendencia, es probable que la aceptación actual sea limitada, con más volatilidad por delante, comentó Ben Caselin, jefe de investigación y estrategia de la criptobolsa AAX, en un mensaje el miércoles.