Telefónica ha reducido una tercera parte su inversión en capital en Hispanoamérica desde 2019, cuando puso en marcha su nuevo plan estratégico y decidió priorizar sus cuatro mercados principales (España, Reino Unido, Brasil y Alemania).
Según los datos presentados por el operador a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la inversión en capital (capex) de Telefónica en Hispam de enero a septiembre de 2019 (que entonces se dividía en Norte y Sur) era de 1,005 millones de euros, mientras que en el mismo periodo de 2022 cayó a 659 millones, un 34.43% menos.
Antes de aprobar este plan estratégico, Telefónica ingresaba en Hispanoamérica 7,665 millones de euros de enero a septiembre de 2019, frente a los 7,036 millones que facturó hasta septiembre de 2022, un 9.2% menos.
La compañía facturó de enero a septiembre de 2019 36,023 millones en total, mientras que en el mismo periodo de 2022 ingresó 34,228 millones -incluyendo el 50% de los facturado por VMO2, la sociedad que ha creado en Reino Unido con Liberty).
Con su plan estratégico, que este domingo cumplió tres años, Telefónica puso en marcha varias iniciativas, entre ellas la creación de la unidad de Hispam con el fin de poner en valor sus inversiones en la región.
Tres años después, la firma española prevé continuar con su política de reducción de capital en Hispanoamérica, en aquellas zonas donde no tiene retornos suficientes, según confirmó hace unos días el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete en un desayuno.
En cuanto al oibda en Hispam, este alcanzó en Hispanoamérica 2,066 millones de euros entre enero y septiembre de 2019, mientras que en 2022 este fue de 1,595 millones. El oibda total de Telefónica fue de 11,450 millones en los primeros nueve meses de 2019, mientras que en el mismo periodo de 2022 fue de 9,593 millones.
En 2019, Telefónica tenía una estructura, en la que diferenciaba Hispam Sur, que incluía Argentina, Chile, Perú y Uruguay, e Hispam Norte (Colombia, México, Venezuela, Central América y Ecuador).
En estos tres años, Telefónica ha vendido su unidad de Costa Rica, y ha vendido parte de su fibra en Chile y Colombia.