Taiwan Semiconductor Manufacturing (TSMC) inició la producción en masa de chips de próxima generación, reafirmándose como el eje de una tecnología crítica por la que luchan gobiernos que van desde Washington hasta Beijing.
El principal fabricante de chips de Apple comenzó la producción a granel de chips avanzados de tres nanómetros en su campus de Tainan, en el sur de Taiwán.
El presidente de TSMC, Mark Liu, expresó su confianza en las perspectivas a largo plazo para la demanda de chips y prometió construir futuras generaciones de chips de 2 nanómetros en la ciudades taiwanesas de Hsinchu y Taichung.
‘La industria de los semiconductores crecerá rápidamente durante la próxima década y Taiwán jugará un papel aún más crítico en la economía global’, dijo Liu. La demanda de chips de 3 nanómetros es ‘muy fuerte’.
Taiwán alberga más del 90% de la capacidad de fabricación de los chips de vanguardia del mundo. Los responsables políticos y los clientes globales desconfían cada vez más de su dependencia tecnológica en una isla que Beijing ha amenazado con invadir y han presionado a TSMC para trasladar parte de la producción al extranjero.
El lanzamiento de los chips de alto rendimiento ocurre desdpués del anuncio de TSMC de que ofrecerá chips de cuatro nanómetros en una nueva planta de Arizona a partir de 2024 y chips de tres nanómetros en una segunda planta de Estados Unidos en 2026.
La compañía también estará aumentando su capacidad en Japón y explorando sitios en otros países como Alemania.
El creciente dominio de TSMC en la fabricación de chips de alta gama coincide con las sanciones de Estados Unidos a la industria de semiconductores de China, con la intención de frenar al rival geopolítico de Washington.
China reclama a Taiwán como parte de su territorio y regularmente amenaza con invadirla para evitar su independencia formal.