La tecnológica taiwanesa Vanguard International Semiconductor Corporation (VIS) y la neerlandesa NXP Semiconductors (NXP) anunciaron este miércoles su plan para construir una fábrica de chips en Singapur, con una inversión inicial de 7,800 millones de dólares.
En un comunicado conjunto, ambas compañías indicaron que crearán una empresa denominada VisionPower Semiconductor Manufacturing Company (VSMC) para iniciar la construcción de una fábrica de obleas de 12 pulgadas en la ciudad-Estado en la segunda mitad de este año, con el objetivo de comenzar la producción en 2027.
La instalación, cuya capacidad de fabricación será de unas 55,000 obleas mensuales para 2029, estará operada por VIS y contará con tecnología transferida por Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), el mayor fabricante de chips del mundo y propietario parcial de VIS.
Las obleas fabricarán chips de 130 a 40 nanómetros, que no son tan avanzados como los manufacturados por TSMC.
VIS inyectará 2,400 millones de dólares y NXP invertirá 1,600 millones de dólares. Ambas firmas aportarán otros 1,900 millones de dólares adicionales para respaldar la infraestructura a largo plazo, mientras que el resto de la financiación, incluidos los préstamos, procederá de terceros.
‘Este proyecto se alinea con nuestras estrategias de desarrollo a largo plazo, lo que demuestra el compromiso de VIS de satisfacer las demandas de los clientes y diversificar nuestras capacidades de fabricación’, aseguró el presidente de VIS, Leuh Fang, en el comunicado.
‘NXP continúa tomando medidas proactivas para garantizar una base de fabricación que proporcione costos competitivos, control de suministro y resiliencia geográfica para respaldar nuestros objetivos de crecimiento a largo plazo’, afirmó Kurt Sievers, presidente y CEO de la firma neerlandesa.
Creada en 1994 por Morris Chang, también fundador de TSMC, VIS está especializada en la producción de semiconductores para la industria automotriz y cuenta con cinco fábricas de obleas de ocho pulgadas en Taiwán y Singapur.
NXP, por su parte, tiene operaciones en más de treinta países y su facturación ascendió a 13,280 millones de dólares el año pasado.