Si la experiencia de compra es el resultado de una involucración personalizada en el punto de venta, cuando el cliente no es percibido como una transacción más, sino como una oportunidad de relacionamiento a largo plazo; si además se le atiende y responde con claridad y exactitud sus cuestionamientos con una actitud de ayuda y consejo y, si el proceso de compra es fácil y ágil gracias a que el agente de ventas está capacitado en el producto y los procesos: la experiencia del cliente será memorable.
Ya existen en el mercado propuestas tecnológicas que facilitan y agilizan los procesos de compra, incluyendo equipos móviles para el pago del cliente y dispositivos portátiles inteligentes para administrar las tareas, consultar precios y revisar inventarios.
Más aún, el sector minorista dispone ya de una computadora móvil MC40 empleada para el manejo de inventarios y reducción de colas en el punto de venta móvil.
Los sistemas computarizados permiten ahora llegar más lejos, administrando las tareas y definiendo las competencias donde los vendedores están más capacitados.
Particularmente en el comercio minorista la atención al cliente está siendo un mercado donde los desarrollos tecnológicos, especialmente los dispositivos móviles, están impactando en la decisión final de compra.
