El boom de las tecnologías móviles ha modificado sustancialmente los hábitos de sus usuarios, por lo cual actividades que hoy en día resultan rutinarias, hace unos años parecían extraídas de alguna novela de ciencia ficción. Tal es el caso de las plataformas de Banca y Comercio Móvil, los cuales permiten a los usuarios realizar transacciones, compras, consultas, transferencias, pagos de impuestos, etc. desde su celular o tableta.
Banca móvil
Las plataformas de banca móvil, a nivel internacional, han gozado de una amplia popularidad pues han permitido incrementar la tasa de bancarización en países que, por diferentes motivos, cuentan con un rezago en términos de penetración. En México, resulta fundamental promover las plataformas de banca móvil, pues la creación y masificación de este servicio permitirá impulsar programas enfocados, sobre todo, a la inclusión financiera.
Al respecto, vale la pena mencionar que, mientras la penetración de telecomunicaciones móviles asciende a 85.6% con 101.3 millones de líneas; datos de INEGI muestran que apenas 39.4 millones de mexicanos utiliza algún producto financiero, ya sea de ahorro, crédito, seguros o ahorro para el retiro. Esto implica que los servicios de banca móvil tienen el potencial de bancarizar a más de 60 millones de mexicanos; es decir, a la población que cuenta con un acceso móvil pero no cuenta con un producto bancario.
Desde 2012, en México operan diferentes plataformas de banca móvil; la mayoría de ellas permiten a sus usuarios realizar transferencias a través de mensajes SMS, retirar dinero de cajeros automáticos y consultar su saldo sin la necesidad de contar con una tarjeta de crédito/débito. Pese a la diversidad de opciones, es importante señalar que hasta la fecha existen diversas barreras a la adopción de este tipo de servicios, pues la información para los consumidores aún es escasa.
Fuente: Elaborado por The Competitive Intelligence Unit con información propia y de INEGI (2013)
Asimismo, algunas plataformas se encuentran disponibles únicamente para usuarios de determinados operadores e, incluso, hay algunas que se encuentran sólo para quienes ya son clientes de una institución bancaria determinada dejando de lado a la población no bancarizada, quienes son beneficiarios potenciales del servicio. Dado lo anterior, es urgente la implementación de plataformas que brinden servicio a la población que actualmente no cuenta con acceso al sistema financiero formal.
Comercio móvil (m-commerce)
En el plano comercial han surgido todo tipo de aplicaciones que tienen como principal objetivo permitir a las empresas estrechar el vínculo con los consumidores, mejorando la experiencia de compra de estos últimos y logrando un mejor posicionamiento de marca. A nivel internacional, existe una amplia oferta de estos servicios, pues se han creado planes de fidelidad, cupones, navegación dentro de la tienda, entre muchos otros que mejoran día con día la experiencia del consumidor.
A diferencia de otros países, en México el comercio móvil no es una práctica común entre usuarios, debido a la baja disponibilidad de servicios y desconfianza por parte de los consumidores. En este sentido, vale la pena mencionar que 3 de cada 5 compras realizadas desde un dispositivo móvil se efectúan en tiendas de aplicaciones y 16% a través de SMS (como las transferencias de tiempo aire a través de SMS).
Son múltiples las razones que impiden a usuarios de telecomunicaciones móviles realizar transacciones desde su equipo. En este sentido, 5 de cada 10 usuarios prefieren emplear su computadora para realizar compras, pues lo consideran más fácil. De hecho, 14% considera complicadas las plataformas actuales de M-Commerce, mientras que 20% considera que no es seguro realizar transacciones a través del móvil.
El camino hacia adelante
En nuestro país la oferta de plataformas de banca y pagos móviles ha presentado un crecimiento importante en los últimos años. Para reafirmar la confianza de los usuarios, resulta oportuno mencionar que las plataformas disponibles en el mercado se encuentran adicionadas con sofisticados sistemas de seguridad que protegen la información y los recursos de los consumidores.
Finalmente, se debe considerar que si bien aún es limitado el número de plataformas de banca móvil disponibles en el país, su creación representa, en sí misma, un importante avance en el camino por poner a México en el mapa de la bancarización. Adicionalmente, resulta fundamental la ampliación de programas sociales de banca móvil, a fin de promover la adopción de servicios bancarios y telecomunicaciones a la población en las comunidades más alejadas del país.