Esta caída es interpretada como los primeros efectos de la presencia del SmartWatch de Apple en los mercados de la relojería.
Según datos de MPB group, el mes de junio las ventas de relojes por parte de los minoristas en Estados Unidos, fueron de 375 millones de dólares, que representan un 11% menos que el mes correspondiente a 2014. Más aún, constituye una disminución del 14%,es decir la más grande desde 2008.
El mayor riesgo lo corren los relojes que cuestan menos de $1000 dólares, ya que los consumidores en este rango de precios son los más propensos a comprar un SmartWatch,según indicó Fred Levin, jefe de la división del lujo de la investigación de mercados.
Sin embargo el reloj de Apple no es la única causa de la recesión, las marcas de menor precio se vieron afectadas por los descuentos que hacen los grandes almacenes ante la saturación de productos. En esta categoría se incluyen marcas como Timex, Guess, Burberry y Tissot.
En opinión del mismo investigador, «en el corto plazo y las marcas a precios accesibles van a tener que pensar muy en serio».
Por otra parte, Elmar Mock, uno de los inventores del Swatch comentó que Apple podría causar una «edad de hielo»para la industria relojera que tiene cuatro siglos antigüedad.
Con información de Bloomberg