El teletrabajo obliga a las empresas a replantear su cultura laboral en favor de modelos que den prioridad a la productividad, sin importar el lugar donde se realice el trabajo.
Implementar un esquema de teletrabajo podría incrementar en 28% la productividad en las empresas y mejoraría la calidad de vida de los empleados quienes, en ocasiones, deben invertir hasta 5 horas diarias en traslados, que sumadas a una jornada de 8 horas, dan como resultado trabajadores menos productivos, según Maite Ramos Gómez, presidenta de la Comisión de Movilidad de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
En la Ciudad de México, el debate sobre la contaminación ambiental ha puesto sobre la mesa el tema del trabajo a distancia, sin embargo, este modelo ya es una realidad en muchos países. De acuerdo con una encuesta realizada por IDC, se espera que este año, 42.3% de la fuerza laboral en Europa sea móvil.
Una encuesta realizada en 2012 por la consultora Vanson Bourne, reveló que para el 80% de los empleadores el trabajo a distancia representa beneficios relacionados con los costos; el 44% indicó que el teletrabajo es un incentivo para retener a su fuerza laboral. Por otro lado, para el 62% de los empleados el trabajo móvil representa una mayor productividad y para 61% de ellos el beneficio reside en menores tiempos de traslado.
Herramientas para implementar el teletrabajo
En la práctica, para que las empresas logren sacar provecho de un modelo de trabajo a distancia, es indispensable contar con las herramientas que les permitan ofrecer a sus empleados un acceso remoto seguro a un entorno de red ágil, que les brinde el mismo desempeño que a los empleados conectados desde la oficina.
Los trabajadores a distancia deben ser capaces de ingresar a las aplicaciones de la compañía mediante conexiones estables y seguras. Por otro lado, las empresas deben contar con herramientas y políticas que le permitan delimitar y monitorear la actividad de sus empleados de manera eficiente y en tiempo real.
Hoy en día resulta imposible imaginar este escenario sin hablar de la nube como parte medular de una solución de teletrabajo. Se estima que para el año 2018, 50% del gasto que realizan las empresas en TI estará enfocado en soluciones basadas en la nube, y para 2020 éste constituirá el 60% de todo el gasto en infraestructura de TI.
En un modelo laboral en el cual cada vez más colaboradores se encuentran en sitios remotos, es indispensable que las comunicaciones desde y hacia la empresa sean ágiles y en tiempo real. Un empleado podrá recibir las llamadas realizadas a su extensión en la empresa directamente a su equipo de cómputo, empleando soluciones de Voz Sobre IP y asistir a reuniones laborales por videoconferencias o, bien, trabajar conjuntamente con otros miembros de su equipo utilizando herramientas de colaboración en tiempo real. Todo ello implica que la red corporativa debe soportar el nuevo tráfico remoto de voz, datos y video, priorizando las aplicaciones críticas para garantizar una experiencia sin complicaciones.
Al respecto, Mario Maldonado, director regional en Juniper Networks México comenta: ‘El trabajo a distancia ya es parte de la cultura laboral y por lo tanto es indispensable tener una estrategia de conectividad móvil. En México la complicación ambiental que enfrenta la capital ha acelerado la adopción de esta tendencia en las empresas, dejando atrás el estatus quo con espacios fijos, para adoptar nuevas formas de trabajo que transformen la dinámica laboral, alcanzando con ello una mayor eficiencia, y permitiendo una mejor calidad de vida a sus empleados’.
‘Para lograrlo es indispensable contar con la estrategia de conectividad y las herramientas tecnológicas que permitan un acceso seguro a aplicaciones corporativas basadas en la nube, así como a la red de la empresa, misma que debe ser ágil y permitir una experiencia indistinta para los empleados remotos y locales’.
Por estos motivos, hoy en día es indispensable que las empresas mexicanas contemplen este modelo que en otros países del mundo ya es una realidad.