Bitcoin, la moneda virtual, no sólo ha llegado a irrumpir en los sistemas de pago, también lo ha hecho en los sistemas de seguridad digital con su base de datos Blockchain.
Blockchain es una base de datos incorporada al sistema de Bitcoin en el que las transacciones que se almacenan contienen básicamente datos como: emisor, receptor, cantidades a ser transferidas y un campo de información adicional.
Las transacciones son reunidas en grupos llamados bloques. Cada bloque contiene información de un cierto número de transacciones, una referencia al bloque anterior en el Blockchain y, lo más importante, la solución a un complejo problema matemático conocido como ‘proof of work’.
Este sistema certifica la información contenida en un bloque, y por otro lado ahuyenta a posibles atacantes que busquen alterar a su favor la información contenida en el bloque.
Una característica importante en esta técnica es que una vez que el bloque está lleno de transacciones, un algoritmo criptográfico crea una firma exclusiva del propio bloque.
De esta manera, cualquier cambio en los datos en el orden de las transacciones (ya sean las cantidades, los receptores, etc.), producirán automáticamente un cambio en la firma y por lo tanto una alteración significativa en la cadena de bloques.
Una vez que se asegura que todas las nuevas transacciones incluidas en un bloque no invalidan a las transacciones anteriores, un nuevo bloque es añadido a la cola de la cadena por un usuario especial llamado ‘minero’. En ese momento, la información contenida en este bloque no puede ser modificada ni borrada y está disponible para que cualquier persona pueda certificarse en la red.
Una copia del Blockchain es almacenada por cada usuario del sistema y es sincronizada periódicamente para asegurar que todos los usuarios comparten una misma versión de la base de datos.
Con estas propiedades, los usuarios del Block pueden verificar de una manera semi-anónima, ya que es imposible asociar la cantidad de un usuario determinado con su respectiva cuenta, no solo los balances de los demás usuarios sino el orden de las transacciones y la información que se ha incluido en ellas.
Esta capacidad elimina la necesidad por parte los usuarios de confiar en entidades centralizadoras que gestionen y almacenen sus datos, ya que estos se encuentran replicados en cada uno de los usuarios del Blockchain. Por tanto, estarán indefinidamente disponibles y sin poder ser alterados o censurados.
Este tipo de computación llamado punto a punto, puede reducir significativamente los costos asociados al mantenimiento del grandes centros de datos, con los beneficios de no representar un solo punto débil para posibles ataques.
Con todas estas propiedades, Blockchain ha generado grandes expectativas entre organizaciones de todo tipo, desde grandes bancos, hasta las Naciones Unidas.
Con información de El País
