Durante la segunda mitad de 2018, los ataques DDoS tuvieron un incremento del 26% en comparación con 2017 y el tamaño del ataque creció en un 19%, de acuerdo con un reporte de Netscout.
Ademas, en marzo de 2018 se registró el ataque más grande de la historia, que tuvo un alcance de 1.7 Tbps, mismo que fue mitigado de manera efectiva por la compañía.
Los ataques distribuidos de denegación de servicio (DDoS) son utilizados por los ciberdelincuentes como un distractor para filtrarse y atacar desde otros puntos, tal como si fuera una cortina de humo, y esconder así la exfiltración de información confidencial.
Por ello, René Hernández, experto de Netscout, recomienda a las organizaciones implementar soluciones de Mitigación Inteligente de Ataques DDoS (IDMS) que operan bajo un esquema híbrido a través de una solución on-premise y otra en la nube.
Según el estudio Kaspersky Lab IT Security Risks 2016, los ataques DDoS han sido parte principal de las técnicas de ataque (29%) que presentaron aquellas empresas afectadas por la ciberdelincuencia. Un 26% de las compañías que sufrió la pérdida de datos fue resultado de un ataque dirigido.
En general, el 56% de los encuestados consideró que los ataques DDoS que experimentaron sus empresas eran una cortina de humo o un señuelo para otras actividades delictivas.