Con la más reciente actualización de su sistema operativo para dispositivos móviles, iOS 10.1, Apple resuelve un grave agujero de seguridad.
La falla residía en que el usuario podía ser víctima de un hackeo de su teléfono con tan solo recibir una imagen, un agujero similar al que ya se había explotado en Mac, iPad o en el Apple TV.
Según el diario The Independent, la apertura de la foto podría provocar la ejecución de un un código malicioso a través del cual los hackers podrían tomar el control completo de los dispositivos.
Ante esto, el poseedor del teléfono quedaba completamente expuesto, ya que simplemente navegando a través de una web podría perder el control de su dispositivo, ya que simplemente no tendría ni que descargar la foto.
Si bien no se ha especificado, el diario apunta a que afectaría a los teléfonos iPhone 5 y posteriores, la cuarta generación de iPad, así como la sexta generación posterior del iPod Touch.
Con información de El Economista.es