Apple se constituye como la mayor compañía cotizada en Wall Street, con 680,000 millones de valoración y además la compañía privada más rentable del planeta.
El iPhone de la firma californiana sigue siendo su producto insignia, ya que representa más del 60% de los ingresos globales, gracias en buena medida a los 74.5 millones de teléfonos vendidos en el trimestre.
La gran incógnita que los mercados no pueden responder es si el iPhone puede continuar su tendencia alcista, ya que si bien en los últimos años el crecimiento ha sido muy robusto -con un aumento trimestral de doble dígito- la realidad es que se considera que el mercado ya está muy maduro y el nivel de competitividad es cada vez más desafiante, principalmente por parte de Xiaomi y Huawei, quienes también son grandes jugadores por ahora.
Al parecer, la variable determinante es China, que cada vez es más importante para Apple, ya que representa casi una tercera parte de las ventas que se generaron.
El gran reto para Apple es -como en el caso de Google, Microsoft, Amazon o Facebook-, su tamaño, ya que a pesar de los incrementos, está latente la inquietud de que podrían no ser suficientes para compensar una moderación de las ventas en el iPhone.
Por otra parte, no favorece un registro a la baja en las ventas del iPad desde 2011.
Con informaciòn de Bloomberg