Varias compañías tecnológicas están emigrando de China ante la tensión comercial con Estados Unidos.
Iventec, el fabricante de computadoras portátiles HP, dijo que cambiará la producción de computadoras portátiles para el mercado estadounidense fuera de China en unos meses, lo que se sumó al éxodo de la industria tecnológica a medida que las dos economías intensifican su guerra comercial.
Iventec trasladará toda su operación de computadoras portátiles con destino a Estados Unidos a su base de operaciones en Taiwán, dijo el presidente Maurice Wu.
Las compañías taiwaneses que fabrican la mayor parte de la electrónica mundial están reconsiderando su dependencia de la economía china, a medida que las tensiones entre Washington y Beijing aumentan.
El incremento de los aranceles sobre los productos fabricados en China amenaza con eliminar sus márgenes y mejorar una cadena de suministro bien engrasada y con décadas de antigüedad.
Se dice que Microsoft, Sony y Nintendo están entre los que ahora sopesan las opciones fuera de la línea de fuego, como el sudeste asiático y la India.
Google ya trasladó gran parte de su producción de placas base con destino a Estados Unidos hacia Taiwán, informó Bloomberg News.
‘La guerra comercial es muy dolorosa para nosotros’, dijo Wu, en una llamada durante la cual los ejecutivos compartieron cómo los cambios de producción han afectado la eficiencia y los márgenes de la compañía.
Las compañías estadounidenses, acostumbradas a utilizar a China como el taller mundial, buscan salir de la línea de fuego a medida que aumentan las tensiones y Beijing muestra la voluntad de reprimir a las empresas extranjeras dentro de sus propias fronteras.
Es un cambio que puede anunciar una tendencia más amplia en largo plazo a medida que China y EU continúan discutiendo sobre todo, desde el acceso al mercado hasta el comercio.
La guerra comercial amenaza con interrumpir una compleja cadena de suministro global que involucra a muchos países más allá de China y Estados Unidos.
Muchos componentes para los dispositivos no se fabrican en Estados Unidos, a pesar de estar diseñados ahí. Un chip de teléfono diseñado por Apple puede salir de una fábrica de Taiwán y luego ser empaquetado (un proceso que lo prepara para la integración en un circuito) en otro lugar, antes de ser enviado a China para ensamblarlo en un iPhone.
No obstante, pocos fabricantes importantes han movido la producción en cantidades realmente significativas y es poco probable que China, como base de la producción mundial de productos electrónicos, disminuya en el corto plazo.
Foxconn dijo que tiene suficiente capacidad para hacer que todos los iPhones se dirijan a Estados Unidos.