Los servicios de telecomunicaciones afianzan, día con día, su posición como elementos catalizadores del crecimiento económico, pues además de revolucionar los mecanismos de comunicación e interacción, han modificado la provisión de diversos servicios, facilitando así el quehacer diario de los usuarios. En el caso del sector financiero, por ejemplo, las plataformas de banca móvil, pagos móviles y banca por Internet han permitido a los cuentahabientes olvidarse de las largas filas características de una sucursal bancaria y realizar pagos y depósitos desde la comodidad de su casa u oficina.
En México, el uso de servicios financieros a través de la red ha venido creciendo durante los últimos años. De acuerdo el Quinto Reporte de Inclusión Financiero elaborado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNVB), en México, hacia finales de 2012, los servicios de Banca Móvil eran usados por 1.06 de cada cien mexicanos, pues existían 883 mil cuentas bancarias vinculadas a una terminal de telefonía móvil. De hecho, este mismo estudio reveló que el número de usuarios de Banca Móvil incrementó 241.9% durante 2012.
Pese a las elevadas tasas de crecimiento de la banca móvil, es innegable que estos servicios son aún desconocidos o tomados con desconfianza por los cuentahabientes mexicanos. Al respecto, la CNVB informó también que de los 24.9 millones de mexicanos que cuentan con alguna cuenta de ahorro formal, únicamente 6% (1.4 millones de personas) cuentan con servicios de banca móvil.
Las plataformas de banca móvil, a nivel internacional, han gozado de una amplia popularidad pues han permitido incrementar la tasa de bancarización en países que, por diferentes motivos, cuentan con un rezago en términos de penetración. Un caso emblemático del alcance de la Banca Móvil se encuentra en Kenya, donde gracias a la implementación del sistema M-PESA fue posible sopesar la ausencia de sucursales bancarias. El sistema M-PESA guarda el dinero de sus usuarios y les permite enviarlo a través de SMS, su éxito ha sido tal que se ha expandido a más de seis países, cuenta con más de 20 millones de usuarios.
En México, resulta fundamental promover las plataformas de Banca Móvil, pues la creación y masificación de este servicio permitirá, impulsar programas enfocados, sobre todo, a la inclusión financiera. Sin embargo, a pesar de que la penetración de telecomunicaciones móviles asciende a 86.5%; datos de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera muestran que apenas 39.4 millones de mexicanos utiliza algún producto financiero, ya sea de ahorro, crédito, seguros o ahorro para el retiro. Esto implica que los servicios de banca móvil tienen el potencial de bancarizar a más de 60 millones de mexicanos, es decir, a la población que cuenta con un acceso móvil pero no cuenta con un producto bancario.
Desde 2012, en México operan diferentes plataformas de banca móvil, la mayoría de las cuales permiten a sus usuarios realizar transferencias a través de mensajes SMS, retirar dinero de cajeros automáticos y consultar su saldo sin la necesidad de contar con una tarjeta de crédito/débito. Pese a la diversidad de opciones, es importante señalar que hasta la fecha existen diversas barreras a la adopción de este tipo de servicios, pues la información para los consumidores aún es escasa. Asimismo, algunas plataformas se encuentran disponibles únicamente para usuarios de determinados operadores e, incluso, hay algunas que se encuentran únicamente para quienes ya son clientes de una Institución bancaria determinada, dejando de lado a usuarios potenciales del servicio.
Finalmente, se debe considerar que si bien aún es limitado el número de plataformas de banca móvil disponibles en el país, su creación representa, en sí misma, un importante avance en el camino por poner a México en el mapa de la bancarización. Gracias a su creación y al creciente interés de los usuarios mexicanos de telecomunicaciones es previsible que, conforme aumente la penetración de los smartphones y los servicios Banda Ancha Móvil, el número de cuentas bancarias asociadas a un dispositivo móvil crezca, y es posible esperar que 2014 será un año clave para el desenvolvimiento de este tipo de plataformas.
Por Ernesto Piedras, Director General de The CIU