El Gobierno de Estados Unidos anunció hoy un programa piloto para llevar Internet de banda ancha a más de 275,000 hogares de bajos ingresos en 27 ciudades del país y una región tribal, con el fin de eliminar barreras en el acceso a la red.
El plan, llamado ConnectHome, es una alianza con empresas privadas como Google o Sprint y organizaciones sin ánimo de lucro para proporcionar Internet de alta velocidad de forma gratuita o a precios muy reducidos, según los detalles adelantados por la Casa Blanca.
‘Menos de la mitad de los hogares más pobres del país tienen una suscripción a Internet. Las familias que viven en el siglo XXI necesitan herramientas del siglo XXI para prosperar’, dijo hoy el secretario de Vivienda, Julián Castro.
El programa beneficiará a unos 200,000 niños de todo el país que viven en hogares de bajos recursos o alojamientos públicos, con la filosofía de que el acceso a Internet es cada vez más imprescindible para la educación y la posterior inserción en el mercado laboral.
Hasta ahora, las empresas y organizaciones han comprometido un total de 70 millones de dólares para implementar el programa piloto, que no implicará el desembolso de fondos del Gobierno federal más allá de una pequeña subvención proporcionada por el Departamento de Agricultura.
Un análisis publicado hoy por la Casa Blanca muestra que el 66.7% de los hogares hispanos del país tenían acceso a Internet en 2013, una proporción que ha ido gradualmente en aumento desde 2001, cuando solo el 34.3% disfrutaban de ese servicio.
El porcentaje de latinos con acceso a Internet es mayor que el de afroamericanos, entre los que el 61.3% lo tenían en 2013; pero inferior que el de blancos, entre los que la cifra era del 77.4%, y los de origen asiático, con una proporción del 86.6%.
Los que menos pueden conectarse a Internet son los nativos estadounidenses, con solo un 58.2% con acceso a la red en 2013.
El programa, que podría ampliarse en un futuro, busca complementar la iniciativa ConnectED, lanzada por Obama en 2013 con el objetivo de que el 99% de los estudiantes del país tengan acceso a Internet en sus escuelas y bibliotecas en 2017.
Desde que se anunció el plan ConnectED, varias empresas privadas han destinado en conjunto unos 10,000 millones de dólares para dotar de computadoras y otras herramientas a las escuelas.
EFE