Catorce fiscales estatales de Estados Unidos presentaron una demanda contra TikTok, acusándola de tener efectos perjudiciales en la salud mental de los niños.
Argumentan que la plataforma utiliza un sistema de contenido adictivo para beneficiarse de sus usuarios más jóvenes, violando así las leyes de protección al consumidor y engañando al público al afirmar que es segura para los menores.
Los fiscales, tanto demócratas como republicanos, llevaron el caso a los tribunales de sus respectivas jurisdicciones. Alegan que características como el ‘autoplay’ que reproduce automáticamente vídeos, y los filtros de belleza que pueden afectar la autoestima, son especialmente problemáticos.
Además, acusan a TikTok de recoger y monetizar datos de menores de 13 años, contribuyendo significativamente a sus ingresos por publicidad en EU.
El objetivo de la demanda es que TikTok cambie estas prácticas perjudiciales, cese el uso de tácticas de explotación infantil, y se impongan sanciones económicas, incluyendo la devolución de ganancias fraudulentas y compensaciones para los usuarios afectados.