En cinco años, todas las personas tendrán un smartphone con inteligencia artificial, aseguró Cristiano Amon, director ejecutivo de Qualcomm.
El directivo hizo esta afirmación tras presentar esta semana una nueva versión del procesador Snapdragon.
Según Amon, los teléfonos que gestionen la IA directamente en el dispositivo serán comunes en un futuro cercano.
Aunque el panorama es prometedor, el verdadero desafío radicará en la aparición de casos de uso, un fenómeno que también se observó durante la transición hacia los smartphones, agregó el CEO.
Qualcomm se mantiene como líder en el mercado de procesadores para dispositivos móviles que utilizan el sistema operativo Android.
En una presentación reciente, la empresa reveló chips más potentes que permitirán a los teléfonos ejecutar aplicaciones de inteligencia artificial y ofrecer capacidades a nivel de computadora portátil.
Al igual que su oferta para el mercado de PC, lanzada a principios de este año, los nuevos procesadores para smartphones presentan un aumento del 45% en velocidad y un menor consumo de energía en comparación con sus predecesores.
Amon también hizo hincapié en la evolución de Qualcomm, que ha transitado de la fabricación de teléfonos a la industria automotriz, luego al ámbito de las PC y ahora se enfoca en el sector industrial. La compañía ha conseguido este crecimiento de manera orgánica y confía en su competitiva hoja de ruta.