La Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) puso a consulta pública los criterios que utilizará para desarrollar el modelo de costos que servirá para definir las tarifas de interconexión de telefonía que se aplicarán en 2011; el organismo regulador propone que las empresas entreguen mayor información sobre sus puntos de interconexión, a fin de hacer más transparente este proceso y verificar su cumplimiento.
De esta forma, Cofetel prevé que esta regulación se verá traducida en beneficios por más de dos mil millones de pesos para la industria, como resultado de una reducción en la asimetría de los precios que pagan por concepto de interconexión y por el establecimiento de una mayor certidumbre jurídica.
En el anteproyecto que el organismo regulador envió a la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer), señala que la propuesta implicará un costo total anual de un millón 850 mil pesos para los 47 agentes regulados; explica que estos costos se derivan de la obligación de entregar la información técnica de las redes y el comportamiento de la demanda de los servicios de interconexión; en este sentido, la Cofetel aclara que los concesionarios ya cuentan con estos datos, por lo que los costos estimados se relacionan con el procesamiento necesario que deben realizar para su entrega en los formatos necesarios.
La Cofetel expuso que los costos estimados para los operadores representan menos del uno por ciento de los beneficios esperados por la regulación y subraya que los beneficios más importantes aportados por este anteproyecto son los no cuantificables, como la objetividad, la transparencia y la certeza en la determinación de las tarifas de interconexión. Explica que su propuesta permitirá que se hagan del conocimiento público la metodología y los cálculos seguidos en la elaboración de los modelos de costos: «Esta medida otorga mayor transparencia en la determinación del valor de las tarifas de interconexión, y certeza a los proveedores de servicios de telecomunicaciones al utilizar criterios objetivos», destacó.
Agregó que este modelo de costos se apega a las mejores prácticas internacionales, pues retoma los ejemplos de política pública que tuvieron éxito en Europa.
Para la asignación de costos, decidió utilizar el método denominado «Costos Incrementales Totales de Largo Plazo» (CITLP), los cuales permitirán calcular el costo que representará a las empresas el ofrecer un servicio de interconexión sobre un determinado periodo de tiempo. También propuso utilizar el modelo denominado Bottom Up, recomendado por la Comisión Europea en 2008, debido a que permite calcular el cambio tecnológico y el impacto que tendrá sobre la elección de los insumos.
Fuente: El Financiero
