Anteriormente Facebook vendía espacios publicitarios en la red social utilizando cookies para rastrear los gustos de los usuarios cuando navegaban en otras páginas de Internet, y así dirigirles anuncios de acuerdo con sus preferencias.
Con Atlas, la nueva plataforma del gigante en redes sociales, se logra mejorar la eficacia de la publicidad, ya que las cookies presentaban algunas impresiones y no rastreaban los gustos y aficiones de cada usuario en dispositivos móviles, cosa que Atlas si puede hacer a través de Facebook.
Ahora, la plataforma Atlas recoge los datos de Facebook y los utiliza en webs externas, de forma tal que, si por ejemplo, un usuario pulsa el «Me Gusta» de la red social de una página de calzado deportivo, es posible que a partir de entonces le aparezcan anuncios sobre productos similares en otras webs.
Facebook compró Atlas el año pasado a Microsoft por 100 millones de dólares, con lo cual pretende competir más de cerca con Google, ya que ésta le sigue superando en la publicidad por Internet.
De hecho, en su segundo trimestre fiscal de este año, Google presentó beneficios derivados de la publicidad por valor de 14,360 millones de dólares, mientras que Facebook obtuvo en ese mismo período 2,680 millones, es decir, casi cinco veces menos.
EFE