Foxconn Technology Group, el principal proveedor de Apple, tiene planes de incrementar sus inversiones en el estado de Karnataka, al sur de la India, a más de 1,200 millones de dólares.
La compañía tiene previsto establecer dos nuevas fábricas de componentes en la región, como parte de una estrategia de diversificación desde China, con el objetivo de mitigar los riesgos derivados de las sanciones económicas y tecnológicas impuestas por Estados Unidos.
Se espera que Foxconn invierta 500 millones de dólares en dos complejos, además de una instalación adicional de 700 millones de dólares que tiene previsto construir en un terreno de unas 121 hectáreas cercano al aeropuerto de Bengaluru, la capital de Karnataka.
Según informes de Bloomberg News, esta planta podría ensamblar iPhones y se proyecta que genere alrededor de 100,000 empleos.
Estos movimientos de Foxconn en India resaltan cómo el país del sur de Asia ha emergido como un destino atractivo para los fabricantes que buscan una alternativa a China, en medio de las crecientes tensiones entre Washington y Beijing.
Además, este cambio en la cadena de suministro global, acelerado por la pandemia de COVID-19 y la guerra en Ucrania, podría remodelar significativamente la forma en que se fabrican los productos electrónicos.
