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La Agenda Digital Nacional: ¿en qué vamos?

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La Agenda Digital Nacional: ¿en qué vamos?

La falta de acciones concretas sigue socavando la competitividad de México en tecnología y telecomunicaciones. ¿Habrá voluntad para superar las diferencias?

Por Laura Sarmiento

El ADN  es un elemento fundamental en el desarrollo de todo individuo y estas siglas también lo serán para el desarrollo de un país como México en los próximos meses y años, si es que queremos ser en verdad competitivos y avanzar en la implementación de una Sociedad de la Información y el Conocimiento.

Cabe apuntar que México es el único país miembro de la OCDE que no cuenta con una agenda digital, por lo que es necesario designar a un responsable a nivel Ejecutivo para definirla y ejecutarla. Una adecuada política de Estado en materia tecnológica genera mejores ingresos y bienestar.

En el último año se han desarrollado diversos foros de discusión que han dado como resultado la denominada Agenda Digital Nacional (ADN), la cual es un documento con más de 120 acciones pendientes de implementación y que buscan hacer de México una nación competitiva a nivel internacional, al tiempo de reducir la brecha de digitalización y hacer de la banda ancha un bien de primera necesidad para el desarrollo de las actividades productivas en el país.

Expertos en el tema argumentan que esta ADN no es suficiente, y que se requiere avanzar en el desarrollo de una nueva Ley Federal de Telecomunicaciones. Se trata de un primer paso pero, ¿en que consiste y cuáles serían las acciones urgentes para avanzar en el sentido correcto?

Antecedentes

Hace algunos meses se formó la Alianza ADN, el primer ejercicio de colaboración de la industria TIC. Empresas consultoras, el Poder Legislativo, la academia y la sociedad civil participaron en la elaboración de un diagnóstico sobre la situación del país materia tecnológica. Se identificaron las mejores prácticas internacionales y, con base en estos datos, se elaboró la Agenda Digital Nacional, la cual propone acciones de política pública que serán un punto de partida para avanzar hacia una Sociedad de la Información y el Conocimiento.

En esta nueva sociedad se percibe a las TIC como un factor indispensable, que no suficiente, para la generación de la competitividad de un país; de ahí que la Agenda Digital Nacional deba ser revisada constantemente para lograr su efectividad.

Las cinco áreas de la ADN

En el documento que se presentó el pasado mes de abril, y el cual se entregó al Ejecutivo Federal, se identifican cinco áreas de acción:

PROMOCIÓN DE LOS INDIVIDUOS: Aprovechamiento tecnológico, mejora del entorno digital, derechos humanos y comercio electrónico. EL DESARROLLO DE LA INDUSTRIA: Interoperabilidad, oferta de software y servicios TIC, acceso a financiamiento, apoyo a las Mipymes, desarrollo de contenidos, así como acceso al mercado global digital. ACCESO Y PROTECCIÓN DE USUARIOS TECNOLÓGICOS: Para generar confianza y seguridad en el usuario y que se logre ver el acceso digital como un derecho fundamental. GOBIERNO ELECTRÓNICO: Se requiere adecuar el marco legal para dar transparencia y seguridad al cuidado de los datos personales. TELECOMUNICACIONES: Infraestructura y operación competitiva para promover el desarrollo de todos los sectores productivos.

Las proyecciones de la ADN están planteadas para implementarse en los próximos cinco y diez años.

La estrategia

En materia de telecomunicaciones destacan las siguientes acciones:

Inversión para ampliar la cobertura de los servicios de banda ancha convergentes, principalmente en zonas rurales, para lo cual se deben eliminar los límites a la inversión extranjera en las concesiones de redes públicas de telecomunicaciones. Aprovechamiento de infraestructura pública para ampliar las redes (milla de red eléctrica, fibra óptica de la CFE y plan de licitación de espectro), así como eliminar el IEPS en telecomunicaciones; facilitar la competencia y que todas las redes presten todos los servicios (incluyendo triple y cuádruple play). También ampliar las carreteras digitales al utilizar los ductos ya existentes para instalar cables de comunicación y fibra óptica, así como que en los nuevos edificios se considere la banda ancha alámbrica o inalámbrica como ocurre con los servicios de luz y agua.

En el corto plazo, se proponen licitar en la banda de los 1700 MHz, los 60 MHz disponibles, porque se ha demostrado que esta frecuencia es de gran interés para el desarrollo de los servicios 4G, así como los bloques disponibles de la banda de 3,500 MHz para la oferta de servicios de banda ancha fijos y móviles, con los que se cubrirían las necesidades de las Mipymes.

Involucramiento de todos los actores

De acuerdo con Rogelio Garza, Director General de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti), para lograr que la ADN se haga realidad se requiere voluntad de todos los involucrados. “La Agenda Digital es la coordinación, conjunción y alineación de objetivos. Creo que si existe voluntad no debemos tener problema en empezar a trabajar”, comentó en entrevista.

A continuación enlistamos diversos rubros en los que la ADN busca lograr un impacto positivo:

Factor humano: En un mundo digital, el individuo debe estar capacitado para usar las nuevas tecnologías y competir profesionalmente, por lo que las acciones se encaminan a incrementar el porcentaje de la población con acceso a internet y mejorar la calidad del mismo. Se establece un Programa Nacional de Alfabetización Digital para mayores de seis años y, posteriormente, un Plan Nacional de Capacitación en Competencias Laborales y Habilidades Digitales (PHD).

Asimismo, la ADN subraya la necesidad de otorgar estímulos fiscales a la adquisición, adopción y diversificación de equipos de acceso a internet y otras aplicaciones, tanto para la población como para las Mipymes. También el desarrollar programas de capacitación en TIC para jóvenes y población desempleada, con lo que se impulsaría la inclusión laboral y la certificación de habilidades en materia TIC, con base en estándares internacionales.

Gobierno: El gobierno deberá ampliar la infraestructura y cobertura de los servicios de gobierno electrónico a todos los municipios, así como mejorar sus prácticas en el aprovechamiento de la interoperabilidad y el uso de las TIC, al completar la modernización de los registros públicos, asegurar la calidad de los datos ciudadanos, así como colocar módulos para realizar trámites electrónicos, lo que llevará a reducir costos y agilizar la atención.

Educación: En materia educativa se deberá avanzar en la integración de proyectos de educación TIC, para la cual se necesitan software e infraestructura acordes con los métodos educativos. Para su instalación se establecerán alianzas público-privadas, que buscarán construir redes locales inalámbricas de acceso libre en los campus escolares y avanzar también en el desarrollo de la educación a distancia, educación autodidacta y asesoría remota.

Sector empresarial: Por lo que hace a las empresas, se plantea la adopción de redes empresariales orientadas a mercados de alto valor agregado, incluyendo la industria TIC, a través de estímulos a la innovación, la generación de talento, el acceso a capital de riesgo y el aprovechamiento de la tecnología.

Comercio electrónico: Se busca desarrollar todos los segmentos, no sólo concentrarse en productos y servicios turísticos, así como impulsar los servicios financieros y la logística transfronteriza.

Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC): Se prioriza la promoción de la investigación y la vinculación con el sector productivo, al tiempo de brindar financiamiento a las Mipymes que desarrollen contenido o servicios digitales. También se establecen por primera vez incentivos para “El Primer Empleo TIC”, es decir, la integración del egresado de carreras TIC a la capacitación y competencia laboral.

Por otra parte, se busca establecer el acceso digital como derecho fundamental, a través de la elaboración de una reforma constitucional que lo garantice, al igual que otorgar seguridad jurídica en las transacciones electrónicas y tipificar delitos en materia TIC.

Hay que destacar que esta Agenda Digital Nacional deberá vencer diversos obstáculos no sólo de tipo político para su implementación, sino también económicos, de idioscincracia e incluso de uso de las nuevas tecnologías.

Sin embargo, Rogelio Garza es optimista y asegura que existe una buena disposición por parte del gobierno federal para lograr los cambios necesarios. Destacó que, en el corto plazo, las acciones prioritarias consisten en que el Ejecutivo nombre un coordinador de la ADN, y que ésta logre instalarse como una política transexenal, parte del Plan Nacional de Desarrollo (PND).

El directivo señaló que “en la medida que podamos alinear los objetivos, las estrategias y las acciones, automáticamente se facilitará el trabajo tanto para los prestadores de servicios como para los usuarios de las TIC."