Por Gabrielle Gauthey, Vicepresidenta de Asuntos Públicos para Alcatel-Lucent
Las empresas de telecomunicaciones tenemos el deber de poner nuestra tecnología a disposición de las personas con el fin de que estas se sirvan de ella para mejorar su calidad de vida. En nuestros días, la banda ancha puede significar inclusión o exclusión social. El no tener capacidad de conexión aumenta la desigualdad ya sea dentro de los países así como entre países.
Los gobiernos y la empresa privada deben generar capacidad para que todos tengan la posibilidad de servirse de la banda ancha, con conexiones que les permita quedarse cerca de sus casa y no tener que viajar horas para acudir a un centro médico, o dejar su producción para desplazarse a una institución financiera.
En cuanto a salud hay muchos avances pero debe haber más inversiones, Alcatel-Lucent firmó en 2011 una iniciativa conjunta con el Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh, uno de los más grandes sistemas hospitalarios de los Estados Unidos, para colaborar en el desarrollo de una plataforma de telemedicina y auscultación remota llamado Telemedicina Centrada en el Paciente (“Patient Centered Telemedicine”).
El más reciente desarrollo de éste programa de co-desarrollo es la sala de auscultación virtual en la nube (“virtual exam room in the cloud”) que ofrece auscultación virtual segura y en tiempo real para pacientes utilizando dispositivos móviles. Por medio de un Portal Web seguro, los pacientes son capaces de acceder a servicios médicos desde cualquier lugar y en cualquier momento a través del audio y del video proporcionado por una variedad de dispositivos móviles. El sistema recupera y actualiza el expediente médico del paciente.
Este ejemplo ilustra que la tecnología es para mejorar la calidad de vida y trabajar en la penetración, la adopción y el uso de la banda ancha no es una cuestión de lujo en la sociedad actual. Es, por el contrario, una necesidad acuciante para promover la equidad y el desarrollo.
Datos de McKinsey & Company señalan que aquellas pequeñas y medianas empresas (PYMEs) que hacen un uso intensivo de internet mejoraron su productividad en un 10%.
Según un estudio reciente del Banco Mundial, un aumento del 10% en la penetración de servicios de Banda Ancha en la región lleva asociado un incremento promedio del 1.38% del Producto Interior Bruto (PIB), un aumento de la productividad de 2.6.
Para dotar de banda ancha tenemos tres pilares: el desarrollo de infraestructura, el gobierno como gran usuario de la banda ancha y las tecnologías de la información y el fomento de la demanda tanto masiva como empresarial.
El desarrollo de infraestructura a su vez tiene tres áreas claves; las redes de conexión con gran capacidad de transporte de información y granularidad suficiente para cubrir a la mayoría de la población, las redes de acceso inalámbricas de banda ancha y las redes de acceso fijas de banda ancha.
Una necesidad que se ha generado para ampliar la banda ancha móvil es la liberación de la banda 700, una excelente banda que permitiría aumentar la cobertura por medio de los dispositivos móviles.
También se requiere que el Gobierno sea un gran usuario de la banda ancha para promover e incentivar fuerte y decididamente el uso de las tecnologías de la información y comunicación apoyadas en redes de banda ancha.
En Francia se estima que el gobierno representa un tercio del uso de las redes de banda ancha en el País. Es necesario que los gobiernos definan procesos seguros para autentificar personas, documentos y realizar validaciones y autorizaciones. Estos procesos permitirán implementar trámites y procedimientos administrativos en los diferentes niveles y áreas de gobierno, añadiendo transparencia, acelerando los procesos y optimizando costos.
Por último se debe fomentar la demanda tanto masiva como empresarial. La demanda masiva se potencia mediante el uso de terminales baratos y en el campo empresarial se debe en el sector empresarial impulsar a las pequeñas y medianas a usar las tecnologías de la información y la comunicación para mejorar su competitividad.
Otro aspecto que no debe quedar de lado es impulsar el desarrollo de las aplicaciones. El desarrollo de las aplicaciones es la clave para la masificación del uso de las tecnologías de la información y de comunicación, particularmente las aplicaciones para dispositivos móviles. Es necesario fomentar el desarrollo de comunidades de desarrolladores de aplicaciones, donde la creatividad y la innovación surja de combinar el talento de los jóvenes desarrolladores de aplicaciones con la información que necesitan para crear sus aplicaciones en un ambiente que permita el intentar e incluso fracasar, el libre intercambio de información y la colaboración.
El desarrollo de la infraestructura de banda ancha es clave para el desarrollo y la competitividad de los Países y para el desarrollo de la sociedad, como en su tiempo lo fueron las redes carreteras, los ferrocarriles, la aeronáutica civil, la infraestructura hidráulica y las redes eléctricas. Es tiempo de que los gobiernos planifiquen, legislen y regulen los servicios banda ancha con un enfoque de sistema nacional, en colaboración con el sector privado y la sociedad civil.