El compartir información es una de las situaciones que han permitido un mayor auge económico, científico y cultural en el mundo. En el caso de la tecnología, la delgada línea entre compartir información y la piratería es apenas visible.
Muchas veces, los usuarios condenan la piratería, la repudian públicamente y no la recomiendan, ya que existen peligros detrás de su descarga, instalación y activación.
Sin embargo, podemos dividir a la piratería digital en dos grandes grupos. El primero, el de contenido digital, donde actualmente el índice de material sin permisos está en el órden del 75% y el de los programas piratas, que gracias a nuevas formas de activación, ha bajado hasta un 40% de acuerdo con diversos especialistas de la industria.
El compartir programas sin licencia con generadores de números de serie suele ser peligroso: la mayoría de las ocasiones contienen malware que hará una pesadilla el uso de la computadora donde se instale, o terminarán siendo eliminados por los departamentos de soporte de los desarrolladores, como ya ocurre con algunos programas de Microsoft y Adobe.
Ahora bien, uno de los puntos que han olvidado los consumidores es la posibilidad que ofrecen ciertas marcas de instalar el programa en varios equipos. Por ejemplo, algunas suites de diseño permiten instalar el mismo programa con el número de serie legítimo hasta en tres equipos. Esto podría permitir que los usuarios rebajen costos al adquirir el software de manera conjunta.
El compartir información y programas de manera inteligente podría disminuir las estadísticas de pérdidas de la industria, y de manera conjunta ayudar a los usuarios a proteger sus equipos de amenazas cada vez más sofisticadas y peligrosas, que se instalan por ahorrar algunos miles de pesos.