Meta Platforms está introduciendo un nuevo chip diseñado para potenciar sus servicios de inteligencia artificial, con el propósito de reducir su dependencia de semiconductores de Nvidia y otras compañías externas.
El chip es la versión más reciente del Meta Training and Influence Accelerator, o MTiA, el cual ayuda en la clasificación y recomendación de contenido en Facebook e Instagram.
Meta lanzó el primer producto MTiA el año pasado.
El enfoque de la compañía hacia los servicios de IA ha aumentado la demanda de potencia computacional. El año pasado, el gigante de redes sociales lanzó su propia versión de un modelo de IA para competir con ChatGPT, de OpenAI.
También incorporó nuevas funcionalidades de inteligencia artificial generativa en sus aplicaciones sociales, incluyendo stickers personalizados y personajes de chatbot con rostros de celebridades.
En octubre, la empresa anunció que invertiría hasta 35,000 millones de dólares en infraestructura para respaldar la IA, incluyendo centros de datos y hardware. ‘La IA será nuestra principal área de inversión en 2024’, declaró el director ejecutivo, Mark Zuckerberg.
Es probable que una parte significativa de ese gasto continúe fluyendo hacia Nvidia, quien fabrica las populares tarjetas gráficas H100 que impulsan los modelos de IA. A principios de este año, Zuckerberg anunció que la compañía adquiriría 350,000 de estos chips, cada uno costando decenas de miles de dólares.
Microsoft y Google están desarrollando chips internamente en un esfuerzo por liberarse de una dependencia muy costosa. Meta se une a sus rivales AWS de Amazon, Microsoft y Google en este intento. Sin embargo, no se espera una solución rápida. Hasta ahora, los esfuerzos no han afectado significativamente la insaciable demanda de la industria de los aceleradores de inteligencia artificial de Nvidia.
El auge de la IA ha contribuido a convertir a Nvidia en la tercera empresa de tecnología más valiosa del mundo, solo por detrás de Microsoft y Apple.
Sus ventas a operadores de centros de datos alcanzaron los 47,500 millones de dólares en el año fiscal 2024, frente a solo 15,000 millones de dólares el año anterior. Los analistas pronostican que esta cifra se duplicará nuevamente en el año fiscal 2025.