Sólo 18% de los hogares cuentan con una computadoraEn pañales, el comercio electrónicoDesconfían empresas ante la carencia de una ley de protección
México presenta una enorme brecha en la adopción de tecnologías de información y comunicación (TIC) en comparación con los demás países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Así lo advierte el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) y ejemplifica el caso de la conectividad de los hogares:
Mientras en el país sólo 9 por ciento de las casas tenían conexión a Internet en 2005, en naciones como Dinamarca, Holanda, Noruega y el Reino Unido eran 55 por ciento.
Aclara, no obstante, que los hogares sí han presentado un ritmo de crecimiento importante en la adopción de computadora como parte del equipo de la casa y refiere que de 2001 a 2005 la adquisición de este aparato aumentó 74 por ciento.
Pero también señala que los avances en la materia en 2005 fueron pequeños, ya que sólo 18 por ciento de los hogares contaban con una computadora.
El CEESP destaca el aumento obtenido por las industrias al implantar avances tecnológicos en sus empresas.
Indica que las empresas incrementaron 5.1 por ciento sus ganancias con el uso de estas herramientas, además de que los negocios elevaron su eficiencia técnica 1 por ciento al utilizar el correo electrónico.
Sin embargo, insiste, aún «falta mucho por recorrer», sobre todo en comercio electrónico.
Los principales obstáculos al uso de nuevas tecnologías son falta de infraestructura en telecomunicaciones de calidad y trabajadores calificados, así como desconfianza de empresas debido a la carencia de una legislación que proteja las transacciones electrónicas.
De acuerdo con un estudio del Banco Mundial (BM), 20 mil empresas en 26 economías de ingresos medio y bajos -en las que no estaba incluido México-, que utilizaron correo electrónico para comunicarse con sus clientes y proveedores, sus ventas crecieron 3.4 por ciento más rápido que las que no lo usaron.
Recomendaciones
El Centro que preside Héctor Rangel Domene, expone que otro dato que resalta y revela los esfuerzos que tiene que hacer el país, es que en 2005 sólo 5.8 por ciento de los usuarios de Internet realizaron transacciones electrónicas.
De ahí que el CEESP hace cinco recomendaciones al gobierno mexicano para que el país pueda acortar la brecha que presenta en materia de TIC con respecto a las naciones desarrolladas de la OCDE:
Uno. Identificar los impedimentos para que las empresas utilicen las tecnologías de la información y comunicación, y concentrarse en implantar algunas políticas que ayuden a remover esos obstáculos.
Dos. Establecer un número limitado de objetivos y acciones claras para alcanzar tales objetivos. Esa mecánica es necesaria para destinar recursos limitados a las prioridades y determinar una secuencia lógica en las iniciativas; por ejemplo, enfocarse inicialmente más en el desarrollo de infraestructura que en educación.
Tres. Definir metas claras, realistas y alcanzables con sistemas de monitoreo y evaluación sistemática. Si un programa de desarrollo de TIC no cuenta con indicadores creíbles sobre los avances, el diseño de una ruta crítica pierde validez.
Cuatro. Clarificar las responsabilidades en la aplicación de los recursos disponibles. Sin recursos no puede haber una implantación profunda, por lo que establecer claramente el nivel de recursos con que se cuenta contribuye a un gasto más preciso a las necesidades.
Cinco. La autoridad debe asegurar que un sistema de monitoreo y evaluación sea parte integral de la estrategia de desarrollo e implantación de las tecnologías de comunicación e información.
Fuente: El Financiero, México
