Elon Musk anticipó que para finales del próximo año habrá cientos de miles de vehículos Tesla completamente autónomos circulando en Estados Unidos sin necesidad de intervención humana.
También afirmó que planea continuar como director general de la compañía durante al menos cinco años más.
Musk detalló que los nuevos taxis autónomos de Tesla comenzarán a operar en fase de prueba el próximo mes en Austin, Texas, y que inicialmente se desplegarán alrededor de 10 unidades. Estos vehículos serán monitoreados de forma remota y limitados a zonas específicas de la ciudad consideradas seguras. Adelantó que, tras esta etapa inicial, el servicio se expandirá a otras ciudades como Los Ángeles, San Antonio y San Francisco.
Tesla busca adelantarse en una carrera tecnológica en la que competidores como Waymo ya suman 250,000 viajes pagados por semana en varias ciudades. Musk minimizó esa ventaja y aseguró que el servicio de Tesla ofrecerá una experiencia superior, al enfocarse en la perfección del producto más que en la competencia.
El lanzamiento de los taxis autónomos ocurre en un contexto en el que reguladores federales han solicitado explicaciones a Tesla sobre la seguridad de su tecnología en condiciones de baja visibilidad, como niebla, lluvia o deslumbramiento solar. Sin embargo, las autoridades enfrentan limitaciones para regular vehículos sin volante o pedales, debido a la falta de normativas nacionales específicas para este tipo de tecnologías.
En cuanto al rumbo de la empresa, Musk declaró desde el Foro Económico de Qatar que continuará al frente de Tesla, aunque reconoció que su paquete de compensaciones, estimado en 56,000 millones de dólares, fue bloqueado por una jueza en Delaware.
También insistió en mantener un control accionario suficiente para evitar ser desplazado por inversionistas activistas, especialmente en un contexto donde proyecta desarrollar millones —o incluso miles de millones— de robots humanoides en el futuro.
Sobre su participación en política, Musk defendió su papel como responsable del departamento de eficiencia gubernamental bajo la administración actual, a pesar de la controversia y el impacto en la imagen de Tesla. Aseguró que no se arrepiente de esa decisión y que la demanda por los vehículos ha mostrado una recuperación significativa. También indicó que reducirá su nivel de participación en campañas políticas futuras, luego de haber donado al menos 250 millones de dólares para respaldar la reelección de Donald Trump.
El valor de las acciones de Tesla cerró con un alza cercana al 1% este mes, alcanzando los 345 dólares por acción. Aunque el precio ha sufrido caídas en lo que va del año, en el último mes acumuló un repunte superior al 50%, impulsado por el renovado enfoque de Musk en la operación directa de la compañía y el desarrollo de nuevas tecnologías.
