Al tiempo que Samsung superó las estimaciones de ganancias, advirtió sobre una demanda decreciente en teléfonos inteligentes.
Los ingresos netos de la firma surcoreana aumentaron 10.7 mil millones de dólares en los tres meses que finalizaron en marzo, informó la compañía con sede en Suwon, Corea del Sur. Las ventas aumentaron un 20% a 60.6 billones de wones.
Si bien los resultados demuestran que el negocio de los chips es sólido, Samsung no ofreció tanta tranquilidad para la industria de los teléfonos inteligentes, donde los proveedores emitieron perspectivas sombrías y sus acciones cayeron en las últimas dos semanas.
La compañía surcoreana dijo que su propia división móvil verá una disminución de la rentabilidad en medio de una demanda débil, y advirtió de una demanda más baja para las pantallas utilizadas en el teléfono inteligente iPhone X, de Apple.
La industria de la telefonía móvil ha sufrido una desaceleración a medida que los principales mercados de Estados Unidos y China se vuelven más saturados.
Los envíos mundiales de teléfonos inteligentes cayeron un 8.5% en el cuarto trimestre y disminuyeron un 0.5% en el año, según un investigador de IDC.
Samsung tenía el 22% del mercado en 2017 en función de los envíos, mientras que Apple tenía un 15%. Huawei, Oppo y Xiaomi completaron los cinco primeros.