Nintendo consiguió ganancias netas de 880 millones de euros entre abril y junio, su primer trimestre fiscal, lo que supone un 28.3% interanual más.
El beneficio operativo de la firma nipona se contrajo un 15.1%, hasta 750 millones de euros, una caída que atribuyó al impacto de la carestía de semiconductores y otros componentes, que le ha llevado a vender menos consolas y también menos títulos en esos meses.
La facturación por ventas de Nintendo se redujo el pasado trimestre en un 4.7% interanual hasta 2,270 millones de euros, pese a un cambio favorable del yen que ha influido positivamente en sus cuentas netas.
Entre los videojuegos lanzados por la compañía en el período, Nintendo dijo que su título de deportes ‘Nintendo Switch Sports’ vendió en los tres meses hasta junio 4.84 millones de unidades, mientras que su juego de fútbol ‘Mario Strikers: Battle League’, lanzado justo antes del cierre trimestral, vendió 1.91 millones de unidades.
La empresa también destacó el buen rendimiento durante esos meses de títulos lanzados en el año fiscal anterior, como ‘Kirby y la tierra olvidada’, que comercializó 1.88 millones de copias (hasta un acumulado de 4.53 millones), mientras que ‘Mario Kart 8 Deluxe’ vendió 1.48 millones, hasta sumar 46.8 millones.
Nintendo dijo, no obstante, que por los efectos de la carencia de suministros en semiconductores y otros componentes, entre otros factores, las ventas de hardware cayeron un 22.9% y las ventas de software bajaron un 8.6% con respecto al año previo.
La empresa vendió 3.43 millones de unidades de su consola Switch, de las que lleva comercializadas 111.08 millones de unidades a nivel global.
En lo que respecta a los juegos para la plataforma, entre abril y junio vendió más de 41 millones de unidades, y las ventas acumuladas de títulos ascienden a 863,590 millones de copias.
La buenas ventas de copias digitales, el aumento de suscriptores a sus servicio de pago Nintendo Switch Online y las estabilidad de las ventas de títulos de terceros ayudaron a sostener las ventas de contenido digital de la empresa, que aumentaron un 16% interanual, hasta unos 650 millones de euros.
Un cambio favorable del yen fue clave para sostener las ganancias netas de Nintendo, que mantuvo hoy sus previsiones para la totalidad del ejercicio (que concluirá el 31 de marzo de 2023) y para el que ya hizo un vaticinio pesimista por la carestía de chips.
La empresa espera que su beneficio neto se reduzca en el año fiscal de 2022 un 28.8%, hasta 2,470 millones de euros, y que su ganancia operativa disminuya un 15.6%, hasta 3,630 millones de euros.
También vaticina una reducción de su facturación del 5.6%, hasta 11,625 millones de euros.
Pese a ello, Nintendo dijo que intentará reformar el grueso de sus usuarios para mantener las ventas con el lanzamiento este año de títulos atractivos como ‘Xenoblade Chronicles 3’, lanzado en julio, y posteriormente ‘Splatoon 3’ en septiembre, ‘Bayonetta 3’ en octubre y ‘Pokémon Escarlata’ y ‘Pokémon Púrpura’ en noviembre.
