Telefónica reportó ganancias de 837 millones de euros en el primer trimestre de 2018, un 7.4% más que en el mismo periodo de 2017, pese a la caída de los ingresos en América Latina.
La multinacional tuvo una cifra de negocios de 12,190 millones de euros, un 7.2% menos que entre enero y marzo de 2017 por el impacto de las divisas, principalmente la depreciación del real brasileño y el peso argentino frente al euro, ya que en términos orgánicos (a tipo de cambio constante y sin cambios en perímetro) se elevó un 1.9%.
La caída de ingresos fue del 14.5% en Brasil, del 13.8% en Argentina, del 6.3% en Chile, del 19.3% en Perú, del 13.7% en Uruguay, del 9.3% en Colombia, del 11.9% en México, del 10.6% en Centroamérica, del 6.7% en Ecuador y del 91.6% en Venezuela.
En este último país, la facturación pasó de los 98 millones de euros en el primer trimestre de 2017 a 8 millones en los tres primeros meses de 2018 y, además, el beneficio bruto de explotación (oibda) se contrajo un 95.4% hasta el millón de euros.
La compañía recortó su deuda en 255 millones de euros con respecto a diciembre y un 9.8% interanual hasta los 43,975 millones, con lo que es la primera vez en los últimos cuatro años que ésta se reduce en el primer trimestre, a pesar de la estacionalidad del capital circulante.
Por áreas geográficas, España se mantuvo como el primer mercado del grupo, con un crecimiento de los ingresos del 1% hasta los 3,098 millones de euros, impulsados por la mejora del ingreso medio por línea (arpu) en los productos convergentes, que se sitúa en 87.8 euros.
Al 31 de marzo, el grupo Telefónica gestionaba 356.9 millones de líneas (un 1% menos que hace un año), lo que incluye 14.8 millones de accesos mayoristas móviles.
A cierre del periodo, el grupo contaba con 45.8 millones de unidades inmobiliarias (hogares y negocios) con red propia de fibra, un 15% más que hace un año, y una cobertura 4G del 73% (9 puntos porcentuales más).