La probabilidad de que el Reino Unido sufra un ciberataque ‘importante’ es solo cuestión de tiempo, considera el jefe del Centro de Ciberseguridad nacional británico, Cieran Martin.
Esta advertencia se produce después de que el jefe del Ejército británico, Nick Carter, señalara este lunes que este país no es inmune a un ataque ‘híbrido’, en el que pudieran emplearse métodos convencionales y otros usados en agresiones de ciberseguridad.
‘Creo que es una cuestión de cuándo, no de si ocurrirá, y tendremos suerte si llegamos al final de la década sin tener que enfrentarnos a un ataque de categoría uno’, afirma el experto.
Por ello, asegura Martin, el Reino Unido está incrementando ahora sus capacidades para poder tomar represalias ante un posible ciberataque.
Martin considera que hasta la fecha este país ha sido ‘afortunado’ por haber evitado ser blanco de una agresión cibernética del nivel más elevado contra sus infraestructuras nacionales, en los sectores de energía o en los servicios financieros.
El incidente más grave detectado en el Reino Unido se produjo en mayo de 2016, cuando el ransomware WannaCry –que atacaba el sistema operativo Windows de Microsoft, atribuido a Corea del Norte– invadió el servicio sanitario público del Reino Unido (NHS).
El responsable del Centro nacional británico también se refiere a otro tipo de ciberataques, de los que se responsabiliza a Rusia, China e Irán.
‘Lo que se ha visto de Rusia hasta ahora contra el Reino Unido son una serie de intrusiones de espionaje y un posible preposicionamiento en sectores clave, pero con una forma de ataque más controlada que otras’.
EFE