Australia aprobó una ley que prohibirá a menores de 16 años usar redes sociales como Facebook, Instagram y TikTok, imponiendo multas de hasta 49.5 millones de dólares australianos (32.1 millones de dólares estadounidenses) a las plataformas que no cumplan.
Con 34 votos a favor y 19 en contra, el texto fue aprobado tras su paso por la Cámara de Representantes, aunque deberá regresar para ratificar enmiendas antes de convertirse en ley.
La medida entrará en vigor dentro de 12 meses, creando una nueva categoría de ‘plataformas con restricciones de edad’, la cual obliga a las redes a implementar controles estrictos para verificar la edad de los usuarios.
La normativa busca proteger a menores del acoso y problemas de salud mental, aunque excluye sanciones para padres o usuarios que la infrinjan. La Comisión Australiana de Seguridad Electrónica será la encargada de supervisar su aplicación.
Grupos como Amnistía Internacional han señalado que esta ley no resuelve el problema de fondo relacionado con los algoritmos adictivos y la explotación de datos. Además, sectores de salud mental y derechos humanos advierten que podría afectar a jóvenes vulnerables, especialmente aquellos que dependen de estas plataformas para encontrar apoyo social.
Por su parte, empresas como Meta, Google y X han solicitado más tiempo para desarrollar tecnologías de verificación de edad, argumentando posibles conflictos con regulaciones internacionales y derechos humanos.
Con esta ley, Australia se suma a otros países que han tomado medidas similares, como España y Puerto Rico, para regular el acceso de menores a las redes sociales.
