Estiman que la industria generó US$40 millones durante 2006 en el país.
En Guatemala la industria de los call centers es relativamente nueva. Sin embargo, el sector privado ya ha puesto interés para explotar la potencialidad que guarda el país al tratar de convertirse en un fuerte competidor a nivel mundial, en el que India es la mejor referencia.
Guatemala podría convertirse en un sitio idóneo para la instalación de los call centers, debido a la cercanía con Estados Unidos. Además para una empresa norteamericana es menos costoso instalarse en Guatemala que en India y la mano de obra es más barata . La estimación contempla que operar un call center en Guatemala es tres veces más barato que en Estados Unidos, explica Tulio García, presidente de la Asociación Gremial de Exportadores (Agexport)
Actualmente el país alberga dos clases de call centers: los inhouse, empresas nacionales que gestionan su propio servicio (restaurantes de comida rápida, por ejemplo) y los outsourcing, que prestan servicio a empresas internacionales (como compañías de energía eléctrica, de comercio y de la banca norteamericana).
Rubén Darío Narciso, analista de la actividad productiva de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), opina que los call centers se aplican muy bien en países en vías de desarrollo. Pero cuestiona la poca preparación académica del recurso humano.
En ese sentido, la Agexport se propuso promover los call centers en el país a través de la Comisión de Servicios, la cual planea la instalación de escuelas de inglés a nivel nacional. La idea es que la población aprenda, porque existe una fuerte demanda de empresas extranjeras pero la contratación depende del dominio del inglés.
De acuerdo con Guillermo Montano, gerente general de Transactel, la industria de los call centers genera hoy aproximadamente 5 mil empleos.
Montano dice que para finales de 2007 se han planteado una ambiciosa meta: duplicar ese número de empleos, lo cual permitiría tentativamente duplicar los US$40 millones que generó la industria durante el año pasado.
Fuente: elPeriódico