Las nuevas tecnologías digitales evolucionan rápidamente. En los últimos años hemos sido testigos de la aparición de dispositivos móviles que cada vez realizan más tareas, además de tecnologías como Big Data, diversas herramientas de análisis y sensores de Internet de las Cosas, que continuamente nos permiten programar y tener datos de todo, desde nuestros coches hasta nuestras cafeteras.
Sorprendentemente una tecnología mucho más antigua está preparada para convertirse en el principal impulsor de la transformación del negocio para 2020: la inteligencia artificial (AI, por sus siglas en inglés).
La inteligencia artificial está comenzando a revolucionar la forma en que las empresas hacen negocios. Cada semana vemos artículos sobre lo que los sistemas cognitivos están logrando o pueden lograr, como: conducir coches durante largos períodos sin necesidad de un conductor; competir contra el mejor jugador del mundo en un juego complejo; imitar a cirujanos cosiendo un cerdo; y arrojando historias financieras más rápido de lo que incluso una gran redacción puede hacerlo.
Grandes empresas están capitalizando un gran número de tecnologías digitales. Pero es el principio moderno de la inteligencia artificial o tecnologías cognitivas lo que ahora lo hace posible. Los sistemas cognitivos imitan el cerebro humano mediante la realización de cuatro tareas clave: sentir, pensar, actuar y aprender. Las aplicaciones potenciales para estas tecnologías son emocionantes y las implicaciones de largo alcance.
El automóvil autodirigido es una aplicación de alto perfil, pero es sólo la punta del iceberg. Muchas industrias y áreas de nuestras vidas serán reimaginadas. Una serie de puestos de trabajo que actualmente reconocemos se transformarán. Esto tiene implicaciones para las empresas que liderarán la adopción de tecnologías cognitivas. Tendrán que cambiar la forma en que van a contratar, desarrollar y retener al personal a medida que se conviertan más tareas en automatizadas.
Sean cuales sean las cifras, está claro que la naturaleza del trabajo cambiará drásticamente en las próximas décadas, ya que el machine learning, el reconocimiento de voz, el procesamiento del lenguaje natural, la robótica y otras capacidades que unimos bajo el estandarte de los sistemas cognitivos, se hacen más eficaces y penetran más intensamente en muchas áreas de nuestras vidas.
¿Qué significa esto para los negocios?
Será primordial pensar en cómo cambiar los roles y las responsabilidades de su fuerza de trabajo con los sistemas cognitivos. En muchos casos, el rol de la gente cambiará de ‘realizadores de trabajo’ a ‘creadores del conocimiento’.
También tendrán que considerar cómo llenar estos nuevos roles. ¿Cómo se reclutará a los analistas de datos expertos en aprendizaje de máquinas e integradores de sistemas que el negocio necesite? ¿cómo responderemos al hecho de que estas habilidades serán escasas y en alta demanda?
La tecnología nos permite lanzar nuestra red más ancha, arrastrarnos en más profundo en las piscinas de talento y ser más predictivos sobre el tipo de personas que necesitaremos, dónde y cuándo.
Por Dr. Harrick Vin, Global Head of Digitate, a Tata Consultancy Services Venture