Los factores macroeconómicos predominantes han afectado a los mercados bursátiles, obligando a los inversonistas a adoptar un enfoque más cauteloso.
La situación ha llevado incluso a las empresas líderes a registrar una importante pérdida de capital en 2022.
La capitalización de mercado acumulada de cinco empresas líderes en Estados Unidos registró bajas de 3.41 billones de dólares, o una caída del 33.8% en 2022.
A principios de año, las empresas tenían una capitalización de mercado total de 10.09 billones de dólares, cayendo a 6.68 billones de dólares el 3 de noviembre.
Apple, la empresa más grande por valoración, comenzó el año con una capitalización de mercado de 2.9 billones de dólares antes de caer un 18.33% a 2.3 billones, ya que el gigante tecnológico registró la menor caída en valoración entre las compañías analizadas.
La capitalización de Microsoft cayó un 34.56%, de 2.5 billones de dólares a 1.64 billones de dólares. Por su parte, la valoración de Alphabet se ha desplomado de 1.9 billones de dólares a 1.1 billones de dólares o 39.82%.
La valoración actual del gigante de los vehículos eléctricos Tesla de 0.66 billones de dólares representa una caída del 38.97% con respecto a los 1.06 billones de dólares registrados a principios de año.
Por último, el gigante de comercio electrónico Amazon registró la mayor caída en la valoración hasta la fecha en un 44.74%, de 1.69 billones de dólares a 0.939 billones de dólares.
El informe resume las implicaciones de la caída de la valoración, teniendo en cuenta que las empresas han disfrutado de un éxito masivo a lo largo de los años.
Una parte del mercado cree que la valoración actual de las acciones tecnológicas no debería ser motivo de alarma. Existe un argumento general de que las acciones han disfrutado de una valoración anormalmente flexible y un fuerte rendimiento superior en comparación con otros sectores.
Dado que la capitalización de mercado actúa como una métrica clave para las empresas, éstas deben actuar y garantizar que se minimicen las salidas de capital. Sin embargo, dependerá de la respuesta general del mercado a la situación económica.