La demanda tradicional de televisores (‘cajas tontas’) ha descendido ante la demanda alternativa de dispositivos (‘inteligentes’) conectados, como smartphones, tablets, portátiles y consolas de videojuegos.
Los medios alternativos se han popularizado con contenidos audiovisuales y ahora son la principal fuente de esparcimiento en el hogar.
La ‘caja tonta’ se está viendo desplazada por los contenidos de los videoclubs online, como Netflix, HBO y servicios similares de Movistar y Vodafone, que están disponibles en móviles o tablets.
Cada vez más la gente dedica su tiempo a los contenidos en sus dispositivos móviles que al tradicional televisor. Según estudio de CTA, los jóvenes entre 18 y 35 años dedican más tiempo (55%) en ver contenidos en sus dispositivos móviles que los televisores (45%).
Según datos de Energy Information, Administration, en el periodo de 2005 a 2009, entre el 54% y 56% de los hogares en Estados Unidos disponía de tres o más receptores de televisión.
De hecho, después de años con incrementos sostenidos en el número de televisiones, este descendió en Estados Unidos hasta una media de 2.3 televisores por hogar, frente a los 2.9 aparatos que se registró en el 2009.
Sin embargo, pese a la mayor demanda de móviles y tablets, el televisor sigue siendo el producto favorito del mercado global de electrónica de consumo, con casi dos tercios del total del sector.
La demanda de televisores también se ha visto alentada por la mejoría de la calidad del experiencia del usuario.
Sobre todo en los segmentos de televisores más caros, donde Samsung registra una mayoría absoluta superior al 50%, según datos de 2016.
Con información de El Economista.es
