Intel reportó hoy beneficios de 14,143 millones de dólares entre enero y septiembre, un 11% menos interanual, pero tuvo mayores ventas en sus negocios de datos y los resultados superaron las expectativas de Wall Street.
El fabricante de chips informó que su facturación en los primeros nueve meses del ejercicio 2019 fue de 51,756 millones, un descenso de apenas el 1% respecto al mismo periodo de 2018.
Los resultados de explotación (antes de intereses e impuestos) de la compañía hasta septiembre fueron de 15,238 millones, frente a los 17,092 obtenidos entre enero y septiembre de 2018.
Durante este tiempo, el fabricante de microprocesadores redujo ligeramente su deuda a largo plazo, hasta 23,700 millones de dólares.
En cuanto a los resultados del tercer trimestre, los más seguidos por los analistas estadounidenses, Intel ganó 6,000 millones de dólares, un 6% menos; y no varió su facturación, en 19,200 millones, comparando con ese mismo periodo del año anterior.
El CEO de la compañía, Bob Swan, afirmó que está ‘reposicionando’ su oferta de productos para ‘aprovechar el crecimiento exponencial de los datos’ y dijo que espera terminar el año con récords.
‘Los resultados del tercer trimestre subrayan nuestro progreso, a medida que nuestros negocios centrados en los datos nos dan los mejores resultados, que constituyen casi la mitad de los ingresos totales’, agregó.
En ese sentido, Intel dijo que su negocio centrado en los datos mejoró la facturación colectiva un 6%, hasta 9,400 millones, especialmente gracias al crecimiento del internet de las cosas, en el que se encuentra su firma Mobileye (20%), y a los productos de memoria (19%).
Su negocio centrado en la PC, en cambio, redujo la facturación un 5%, hasta 9,700 millones.
Los resultados fueron divulgados tras el cierre de la sesión en Wall Street, donde hoy Intel se revalorizó un 0.99%, y tras una buena acogida de los inversores en las operaciones electrónicas posteriores la firma avanzaba un 3.04%.
