Un grupo de jóvenes de Miami organizó para el próximo 31 de enero de 2014 una «hackathon» (encuentro de programadores) que reunirá a dos centenares de personas interesadas en «ayudar y apoyar a jóvenes cubanos dentro de la isla a acceder a Internet y conectarse con el mundo».
El grupo Raíces de Esperanza, fundado en 2003 por estudiantes cubano-estadounidenses, busca con esta iniciativa cerrar la brecha tecnológica que sufren los cubanos, donde menos del 5% de la población tiene acceso a Internet.
«Queremos dar herramientas a los jóvenes dentro de la isla para que expresen sus opiniones y puedan conectarse entre ellos y con el mundo» vía Internet, explicó hoy a Efe Raúl Moas, director ejecutivo de esta organización sin ánimo de lucro que «trabaja para animar a los cubanos a ser los autores de su propio futuro».
Dejó claro que la iniciativa «Hackathon for Cuba» no tiene carácter «político ni ideológico» y sólo busca «maneras innovadoras de promover la conectividad e intercambio de ideas de los jóvenes cubanos a través de Internet y la tecnología».
Está previsto que la reconocida periodista y disidente cubana Yoani Sánchez, autora del blog Generación Y, asista a la cita de dos días, que tendrá lugar en The Lab Mami, en el distrito de Wynwood.
El objetivo de este evento de programación, en el que impera la colaboración, es que los participantes propongan ideas y formen equipos capaces de crear programas tecnológicos y aplicaciones que «ayuden a promover la conectividad en Cuba», resaltó Moas.
El activista criticó que Cuba siga siendo todavía el país con una «tasa más baja de acceso a Internet del hemisferio occidental» y que menos del 20% de la población tenga acceso a la telefonía móvil.
Lo que resulta clave ahora, destacó, es que podamos «aprovechar la apertura en el sector de tecnología en la isla» y «tender puentes con los jóvenes cubanos».
Mostró su deseo de que durante la cita los programadores e informáticos reunidos logren conectarse a través de Internet con algunos jóvenes en la isla. «Ojalá lo podamos hacer», apostilló.
EFE
