El equipo nórdico de VIRTUE y Copenhagen Pride, crearon ‘Q’, el primer asistente de voz que no suena ni como hombre ni como mujer.
‘Q’ se presentó en el evento South by Southwest (SXSW), uno de los mayores festivales del mundo sobre el impacto de la tecnología en la sociedad, celebrado esta semana en Austin, Texas.
En el sector tecnológico se ha percibido que los usuarios prefieren una voz masculina o femenina, dependiendo del escenario. Hasta ahora, la voz masculina se utiliza generalmente en roles más autoritarios, como en aplicaciones de banca o seguros; mientras que la voz femenina se usa en roles más orientados al servicio, como Alexa de Amazon, Siri de Apple o Cortana de Microsoft. Con el arribo de ‘Q’ se marca el fin de estos estereotipos establecidos.
El desarrollo de una voz neutra ha sido posible gracias a las investigaciones de Ana Jøngensen, una lingüista de la Universidad de Copenhague, que utilizó su investigación académica para definir los parámetros de una voz con género no binario.
Los investigadores comenzaron a trabajar en el proyecto en el verano del año pasado. Grabaron cinco voces que no tenían los parámetros de voz femenina o masculina. Utilizaron un software específico de modulación y modificaron las voces a un rango neutral establecido mediante investigación.
Las voces ya moduladas se probaron en un estudio a nivel europeo con más de 4,600 personas a las que se les pidió puntuar cada voz en una escala de 1 (hombre) al 5 (mujer). Las encuestas consiguieron modular la voz hasta que se consideró neutral.
Después de haber conseguido desarrollar una voz de género no binario, el próximo paso es construir la estructura de inteligencia artificial. Aunque los creadores son más ambiciosos y esperan que además de que ‘Q’ se establezca en productos de asistencia de voz, smartphones o tablets, también se podrá oírla en las estaciones de metro, cines o teatros.
‘Q fue creado para ser útil para los cuatro grandes tecnológicas: Microsoft, Apple, Amazon y Google. No ha pasado nada todavía pero estamos en conversaciones con algunas de estas empresas’, aseguró Ryan Sherman, uno de los creadores. ‘Y ya estamos hablando con tres de ellas’, concluyó Emil Asmussen, miembro del equipo creativo.
Julie Carpenter, investigadora sobre el comportamiento humano e interacción de robots, cree que no existe ninguna razón para que no se disponga de una tercera opción.
‘Incorporar la perspectiva de género en la tecnología puede ayudar a la gente adaptar técnicas y sentirse más cómodo’, asegura. Carpenter se refiere a todas las personas que, aunque sus características físicas corresponden a hombre o mujer, sienten que su identidad no tiene por qué ser una u otra (género no binario o tercer género).
Uno de los creadores de ‘Q’, Emil Asmussen, asegura que la gente está sorprendida de que aún no existiera. ‘Los no binarios dicen que abrir el teléfono y tener una tercera opción hace que se sientan incluidos’.