Einride, una startup sueca de camiones eléctricos, recaudó 110 millones de dólares de inversionistas, incluida la división de capital de riesgo de la compañía naviera más grande del mundo, AP. Moller-Maersk, para expandir su negocio de logística en Europa y Estados Unidos.
La compañía, con sede en Estocolmo, lanzó el camión de transporte autónomo Einride Pod en 2017. Desde entonces, ha desarrollado su propia plataforma de software de logística y ha convertido camiones Diesel convencionales de DAF Trucks NV en propulsión eléctrica para clientes como Oalty, Lidl y Electrolux.
Los fabricantes de camiones, incluidos Daimler y Volvo están ampliando sus ofertas eléctricas y trabajan para ofrecer plataformas sin conductor.
El transporte por carretera sigue dominado por los camiones de Diesel, pero una regulación más estricta ha llevado a los fabricantes a acelerar el desarrollo de alternativas.
Si bien la adopción masiva del transporte autónomo en las vías públicas puede tardar años, Einride dice que su plataforma de movilidad está preparada para el transporte por carretera autónomo y eléctrico, lo que permite a los clientes utilizar información en tiempo real y conocimientos basados en datos para optimizar la logística.