Telefónica Brasil, junto con las filiales brasileñas de Telecom Italia (TIM) y América Móvil (Claro) cerró hoy el proceso de compra de los activos de telefonía móvil de la operadora brasileña Oi por unos 1,162 millones de dólares.
Según informó la compañía española al regulador bursátil español, la CNMV, Telefónica Brasil adquirió su participación en los activos del negocio móvil del Grupo Oi por un valor aproximado de 5,373 millones de reales brasileños (unos 1,162 millones de dólares al tipo de cambio actual).
Hoy hizo un pago de 4,885 millones de reales brasileños, en tanto que el importe restante está retenido sujeto a determinados ajustes de precio y potenciales obligaciones de indemnización al amparo de los términos del acuerdo firmado en enero de 2021.
Estas cantidades incluyen una posición de caja neta en la compañía adquirida de unos 83 millones de reales brasileños.
La operación se hizo mediante la compra por Telefónica Brasil de todas las acciones de la compañía Garliava RJ Infraestrutura e Redes de Telecomunicações S.A. (Garliava), a la cual se habían aportado los activos del negocio móvil del Grupo Oi asignados a Telefónica Brasil.
Además, Telefónica Brasil asumió un compromiso de pago complementario por importe de hasta 115 millones de reales brasileños sujeto al cumplimiento de ciertos objetivos por parte de Oi, de los que 40 millones de reales brasileños se han pagado hoy.
También abonó 148 millones de reales brasileños por algunos servicios transitorios que Oi prestará a Garliava y firmó un acuerdo de capacidad de transmisión de datos en modalidad take-or-pay (compra garantizada), con un valor actual neto de 179 millones de reales brasileños, a abonar mensualmente por un período de 10 años.
Los activos del negocio móvil del Grupo Oi asignados a Telefónica Brasil son unos 12.5 millones de clientes (el 30% de la base total de clientes de ese segmento del negocio); un espectro de 43MHz como promedio ponderado nacional basado en la población (46% de las radiofrecuencias de los activos), y el uso de en torno a 2,700 sites de acceso móvil (el 19% de los sites totales).
Oi, en concurso de acreedores desde 2016, vendió en diciembre de 2020 sus activos en telefonía móvil por 16,500 millones de reales al consorcio formado por Vivo (Telefónica), TIM Brasil y Claro, aunque la operación estaba sujeta a la aprobación de los reguladores, ya que las tres acapararán el 98% del mercado de telefonía móvil en Brasil.
El órgano antimonopolio de Brasil aprobó en febrero esta venta y la condicionó al cumplimiento previo de varias medidas que garantizaran la libre competencia y la entrada de nuevos operadores.
Según TIM, la operación creará un nuevo equilibrio infraestructural en el mercado brasileño, en el que habrá tres operadores principales que garantizarán un alto nivel de competencia, beneficios para los clientes e inversiones adecuadas para el desarrollo de las infraestructuras de telecomunicaciones y la digitalización del país.
Oi posee la mayor red de telefonía fija de Brasil y es la cuarta operadora del mercado móvil, por detrás de Vivo (filial de la española Telefónica), TIM y Claro (de la mexicana América Móvil).
La posibilidad de fusionarse con TIM ha fortalecido a Oi en el mercado móvil y le ha abierto la posibilidad de competir en Brasil en mejores condiciones con Telefónica y América Móvil, que ofrecen en el país telefonía fija, telefonía móvil, acceso a internet y televisión por suscripción.
Además, puede ayudar a aliviar su elevada deuda, generada en gran parte por los problemas que le acarrearon su fusión con Portugal Telecom, efectuada en 2013 pero liquidada a comienzos de 2015, con la venta de los activos de la compañía lusa a la luxemburguesa Altice.