El jefe de servicios de Apple, quien comparecerá ante el tribunal en Washington este martes, tiene la intención de defender el lucrativo acuerdo que convirtió al motor de búsqueda de Google en la opción predeterminada en el iPhone, sosteniendo que era la mejor elección para los consumidores.
Eddy Cue, Vicepresidente Senior de Servicios de Apple y arquitecto del acuerdo, tomará el estrado durante el juicio del Departamento de Justicia contra Google, en el que el gobierno alega que Google utilizó sus dominios de búsqueda para obstaculizar la competencia.
Cue planea afirmar que siempre ha creído que Google es el mejor motor de búsqueda, y por eso Apple lo elige como la opción preferida en sus principales dispositivos, según una persona familiarizada con su anticipado testimonio.
Google paga a Apple miles de millones de dólares por esta posición destacada en productos como el iPhone, lo que hace que el acuerdo sea de particular interés para el gobierno. La cuestión es si el gigante de las búsquedas se abrió paso en los dispositivos Apple a expensas de sus competidores.
En su testimonio, Cue planea enfatizar que la compañía de la manzana facilita a los consumidores cambiar el motor de búsqueda principal.
La empresa tampoco ve la necesidad de desarrollar su propia herramienta de búsqueda, ya que Google es claramente la mejor opción. Esto contrasta con el enfoque de la empresa en otras áreas, donde compiten en software de mapas y asistentes de voz, así como en sistemas operativos para teléfonos y computadoras.
Se espera que el juez destaque que Apple tiene acuerdos de búsqueda con otras empresas que proporcionan opciones no predeterminadas integradas en el navegador de Internet Safari.
De manera similar a su acuerdo con Google, Apple obtiene una parte de los ingresos publicitarios generados cuando los usuarios seleccionan sus motores de búsqueda como su opción principal en Safari.
Google, antes de unirse a Apple en 2018, mencionó nuevas funciones en iOS 17 y iPad OS 17 que permiten a los usuarios asignar un motor de búsqueda predeterminado diferente para la navegación privada. Esto significa que los consumidores pueden cambiar entre Google y otra opción más fácilmente.